
La fotógrafa Claudia del Rivero nos cuenta de su concepto y cómo inició en el mundo de la luz y la sombra
Por: Jesús Ricalde
Quequi
La fotógrafa Claudia del Rivero se define como una mujer que le encanta soñar, viajar y con metas bastante altas, cuenta con una experiencia de 9 años, tiempo en el cual se ha plasmado en sus fotografías su sentir. La contactamos para entrevistarla y conocer un poco más de su fotografía introspectiva.
Q: ¿Cómo iniciaste en el mundo de la fotografía?
CDR: Es muy chistoso porque desde que era muy chiquita mi papá siempre ha tenido una cámara en la mano, él es pintor y escultor, entonces esa aproximación al arte en general, me hizo empezar a curiosear esa parte y siempre vi la fotografía como un hobbie. En la universidad estudié Ciencias de la Comunicación, después fotografía, ahí fue cuando descubrí que ese hobbie tenía más facetas. Comercialmente, cuando nació mi hija, me dedique a tomarle fotos y ahí descubrí que se podía crear un negocio a partir de esto.
Q: ¿Si no hubieras sido fotógrafa que otra profesión te hubiera gustado?
CDR: La parte visual y creativa siempre ha estado dentro de mí, desde chica decía que iba a ser pintora o escultura como mi papá, de pronto decidí que quería ser directora de cine, pero cuando llegó el momento de decidir carrera, una de las opciones que yo tenía era neurocirujano.
Q: ¿Cuáles son tus técnicas de fotografía favoritas?
CDR: Me encanta trabajar con los claroscuros, muy influenciado por Rembrandt, uno de mis pintores favoritos, pero aparte me gusta trabajar con reflejos, exposiciones múltiples, siluetas, eso es básicamente mucho de lo que se puedes encontrar en mi trabajo cuando me permiten ser, dentro de ello está el retrato que es lo que trabajo bastante.
Q: ¿Cómo sientes que ha sido tu evolución y crecimiento como fotógrafa?
CDR: Me he dado cuenta que la fotografía que estoy haciendo, refleja los momentos que estoy viviendo, independiente a lo que esté trabajando con un cliente. De pronto me empecé a dar cuenta que la fotografía se trata de uno mismo, me di cuenta de, qué tanto yo proyectaba cosas de mi vida con la foto. Mi trabajo ha evolucionado al mismo tiempo que yo he crecido. Ahora por ejemplo ya me estoy fijando más allá de la foto “per se”, y antes nada más veía la composición para retratar algo. Hoy en día están como muy implícitos los sentimientos que traigo dentro.
Q: ¿Estás trabajando en algo ahora en cuarentena?
CDR: Si es muy interesante; todo empezó a través de un grupo de Facebook en donde pusieron retos, decidí que para no dejar de crear lo iba a tomar. El primer reto fue el autorretrato, y eso es algo que he evadido mucho, por cuestiones personales; pero me fui como “hilo de media”, empecé a realizar varias fotografías, que de hecho están en mi Instagram.
Q: ¿Cuál crees que es el secreto de una buena fotografía?
CDR: Nosotros respondemos a la estética, tal vez lo que yo vea y me haga “match” no es lo mismo que te va a gustar a ti o a cualquiera de las personas. El secreto es que, encontremos la razón de “qué es lo que nos está llamando la atención de un encuadre”, independiente a que no lo estemos fotografiando. Cuando te dejas llevar por esa intuición, es ahí, cuando te das cuenta como es fotografiar como tal y no nada más que la persona se voltee, te sonría y listo.
Q: ¿Por qué muchas de tus fotografías son en blanco y negro?
CDR: El blanco y negro para mi tiene algo muy interesante, es la búsqueda del contraste en los claroscuros y luces y sombras. Sinceramente creo que no estoy en el punto, me gustaría lograr el blanco-blanco y el negro puro. Sin embargo, es muy interesante porque te permite encontrar otros detalles más allá de lo que puedes ver en una fotografía a color, puedes encontrar más sentimientos, expresar todo eso que con el color te causa un poco de ruido. En mi caso yo lo usé para la exposición que tuve en la República Checa y realmente fue un gran impacto, debido que es demasiado introspectiva, por situaciones que yo estaba pasando en el momento.
Q: ¿Qué prefieres, Flickr o Instagram?
CDR: Manejo los dos, pero Instagram me funciona mejor, me ha permitido abrirme un poco más al mundo, se me hace hasta más amigable, claro que hay que ser muy selectivo y dar una continuidad de color o de tipo de fotografía.
Q: ¿Qué le aconsejarías a un joven que quiere ser fotógrafo?
CDR: He tenido alumnos y les he dicho que se avienten, el mundo es de los arriesgados. Creer en lo que estás queriendo, por algo te llama. Habrá altos y bajos, este ambiente no es fácil porque hay demasiada competencia, pero el chiste es mantenerse siempre actualizado, ser claro y selectivo como de quién tomas la información, a veces hay información que te sirve y a veces no. No importa el equipo con el que comiences, aunque sea con el celular, hoy los celulares te permiten tomar fotografías de bastante calidad. Es importante tomar lo que tienes y utilizar la creatividad al máximo, es algo muy chistoso, porque muchos de los fotógrafos, y yo me pongo en esta categoría, de pronto tienes todo el equipo y por flojera o porque te es más fácil moverte con menos equipo, regresas a lo básico.
Q: Planes a futuro.
CDR: Planeo continuar con los retratos con mi hija, quien me ayuda a ser mi modelo; eso para perfeccionar mis técnicas y redescubrir muchas otras cosas. Ahora me encuentro trabajando sobre el rediseño de mi página para abrir una categoría de tienda y vender mis fotografías de viajes, cada que salgo de viaje regreso con bastante material, por lo que planeo abrirlo a manera internacional, hacer fotografía de stock y branding para las pequeñas empresas, hoy en día es lo que vende es lo visual.