Guerrera de oro
Chetumal
De familia humilde y carismática, Fátima Crisanto Ayil, se ha convertido en un gran ejemplo para su familia y jóvenes: demostró que pese a su corta edad, con dedicación, esfuerzo y pasión, se pueden cumplir los sueños y metas que se propongan.
En una casa modesta, ubicada en la comunidad de Calderitas, se puede sentir la calidez y el buen trato de la familia Crisanto Ayil, sobre todo, el apoyo incondicional y fortaleza que une los lazos más fuertes que pueden existir: El amor de madre a hija y la mano fraternal de cuatro hermanos.
Hija menor de Concepción Ayil Estrella y Venancio Crisanto García, Fátima ha logrado consolidarse como campeona nacional de luchas asociadas; ha ganado medallas de oro en las olimpiadas nacionales que se han realizado en los estados de Nuevo León (dos veces), Sonora, Jalisco, Yucatán, Puebla, Aguascalientes, Veracruz, Baja California, así como en un evento en Belice.
Europa en la mira
Ahora, su nueva meta es llegar a Francia, por lo que entrena más de cuatro horas diarias con su preparador Silvio Amado Michel Rengifo, para ser una de las participantes en las competencias mundiales que serán a finales de agosto en el país galo. El sacrificio la deja a veces sin salida con amigos ni fiestas, porque la meta es ser campeona mundial.
Fátima (59 kilos) recuerda que su pasión por las luchas asociadas nació a los 8 años; en ese entonces era alumna de taekwondo y su hermana practicaba lucha. Un día participó en uno de los entrenamientos y descubrió a lo que se quería dedicar, se encontró con su vocación de guerrera.
Con 17 años de vida, ha ocupado nueve de ellos para ser campeona nacional en igual número de ocasiones, además de tres campeonatos panamericanos. Sus medallas de oro se han convertido en la leyenda de dedicación, esfuerzo y caídas superadas.
En su vida diaria como adolescente -dice- no se ha encontrado en ninguna situación que requiera aplicar sus habilidades de lucha para defenderse de una agresión o de proteger a alguna persona, pues sólo han sido puestas en acción en competencias.
Su entrenador, quien la acompañó durante la entrevista, aseguró que en ella vio -y le queda mucho- potencial por explotar, “además de ser una alumna con mucha dedicación y disciplina, podrá lograr cualquier meta que se proponga”, auguró.
Compañía maternal
Su madre está con ella en todo momento. Con la voz temblorosa de emoción y con un semblante de felicidad, dijo a Quequi que su hija la ha llenado de orgullo y que ha sido un gran ejemplo, por sus grandes logros que dejan atrás los obstáculos que han vencido como familia.
Un sueño más de Fátima es ser entrenadora e impulsar a jóvenes y niños a encontrar su pasión por el deporte, como le ocurrió en el año 2007, cuando nació su historia como deportista. Y asegura que no sólo entrena su cuerpo para ser campeona, sino también su mente; en el próximo ciclo escolar iniciará su carrera como técnico en Deportes.
Con la emoción de estar rodeada de su familia, la medallista dijo estar agradecida por el apoyo que ha recibido, tanto de su madre como de su entrenador, quienes han confiado en ella y le han enseñado el camino hacia la victoria. (Por Mayra Cervera Quequi)
‘Gladiadora dorada’
La destacada atleta quintanarroense ha demostrado su hegemonía en este deporte, tanto a nivel nacional como internacional.
AÑO EVENTO ENTIDAD MEDALLA
2008 ON Nuevo León ORO
2009 ON Sonora ORO
2010 ON Jalisco ORO
2011 ON Yucatán ORO
2012 ON Puebla ORO
2103 ON Aguascalientes ORO
2014 ON Veracruz ORO
2015 ON Nuevo León ORO
2016 ON Baja California ORO
Además destacó en los Juegos Panamericanos de Río de Janeiro, Brasil (2007) y Guadalajara, Jalisco (2011).