Arribo masivo de cruceros; inicia la temporada alta; del 6 al 12 de noviembre se recibirán 27 hoteles flotantes
Por Luis Roel Itzá
Quequi
Un sustancial aumento del 50% tuvo el arribo semanal de cruceros que pasó de 18 a 27 barcos y una derrama económica de casi siete millones de dólares, a razón de 85 dólares por turista que visita el destino, que en esta semana serán más de 80 mil visitantes y otros 40 mil tripulantes, que de igual manera dejan recursos con sus compras que realizan durante las ocho a 12 horas que permanecen en la isla.
De acuerdo a la programación proporcionada por la Administración Portuaria Integral de Quintana Roo (Apiqroo), del 6 al 12 de noviembre se recibirán 27 cruceros: el lunes arribarán tres barcos, el martes será el de mayor actividad de la semana con seis, mientras que miércoles, jueves y viernes, serán cinco de manera respectiva, cerrando el sábado con tres hoteles flotantes de visita en el puerto.
La actividad en los muelles quedó dividida de la siguiente manera: Puerta Maya será quien más cruceros reciba en la semana con 12, luego le sigue Puerta Maya con diez y la terminal marítima de Punta Langosta con cinco barcos únicamente.
De esta manera estaría iniciando prácticamente la temporada alta de turismo en el que los norteamericanos principalmente, buscan escapar de las bajas temperaturas del norte y llegar a sitios más cálidos.
Sin embargo, prestadores de servicios turísticos relacionados con cruceros, aseguran que todo es una ilusión, ya que si llegarán más cruceros y más turistas, pero la mayoría de ellos vienen sin dinero tras pasar antes por otros destinos del Caribe y al llegar a Cozumel, les queda muy poco para gastar, además de que existe una competencia desigual con empresas grandes de tours que pagan a las navieras para que desde a bordo les vendan paquetes de tours a sus negocios y los cruceristas ni siquiera pisan tierra cozumeleña, debido a que sólo bajan del barco, salen al estacionamiento del muelle y ahí están siendo esperados en autobuses o vehículos grandes para ser transportados y por la tarde ser regresamos de la misma forma para abordar los barcos, sin tener oportunidad de conocer más atractivos y comercios.
