Exigen auditoría y cárcel a lideres taxistas de Cancún
Envían una carta pública a las autoridades locales.
Por Redacción > Quequi
Socios del Sindicato de Taxistas “Andrés Quintana Roo” de nueva cuenta alzaron la voz y exigen una investigación exhaustiva y acciones legales contra los dirigentes y secretarios sindicales, por acusaciones de corrupción y abuso de poder que han plagado la organización durante años.
En un escrito público dirigido a la gobernadora Mara Lezama y la presidenta municipal de Benito Juárez, Ana Paty Peralta, solicitaron una “investigación, auditoría y cárcel para estos mafiosos».
Los señalados en este escándalo incluyen a Heriberto Núñez, secretario general de los taxistas; Gonzalo Salas, secretario de Trabajo; Celso Góngora Bobadilla, subsecretario de Trabajo; Ruth Salazar Ceballos, secretaria de general y Rubén Novelo, secretario de Finanzas.
Los socio de taxistas recordaron el oscuro pasado en el que los líderes sindicales se adueñaron de la organización para su propio beneficio.
Durante el mandato de Roberto Borges, Erick Castillo y Erasmo Avelar saquearon las empresas del sindicato y adquirieron gasolineras a expensas de los socios y concesionarios.
Además, afirmaron que amenazaban con cancelar las concesiones de aquellos que no estaban de acuerdo con sus decisiones, actuando bajo la supuesta orden del gobernador.
«Nos pusieron el pie en la garganta por 6 años», lamentó uno de los socios.
También detallaron las lujosas adquisiciones de Erick Castillo durante su mandato, que incluían un campo de softball y una casa de campo en la localidad de El Tintal.
Hicieron referencia a la renta de un corralón al gobierno federal para guardar maquinaria del proyecto del Tren Maya, así como el uso de escoltas de la Fiscalía General del Estado y el empleo de intimidadores financiados por el sindicato.
Refieren que al concluir su periodo, Erick Castillo dejó a Erasmo Avelar y a Rubén Carrillo en puestos clave.
Rubén Carrillo, según las acusaciones, aprovechó su posición para convertirse en el concesionario mayoritario de Maya Caribe, acumulando urvans y autobuses sin pagar renta de placas.
Ante esta serie de acusaciones, los taxistas y socios exigen respuestas inmediatas de las autoridades locales y una investigación a fondo sobre estas alegaciones de corrupción y abuso de poder en el sindicato.