Punta Esmeralda, una playa sin ley
Por Luis García > Quequi
Asesinatos, violaciones, robos a cualquier hora, cristalazos y violentos zafarranchos hacen del paradisiaco balneario Punta Esmeralda en una pequeña playa sin ley, ante la insuficiente vigilancia por parte de los uniformados de Seguridad Pública.
Enclavada en los linderos de las colonias populares Luis Donaldo Colosio y Nicté-Ha, hacia el norte de la franja costera de Playa del Carmen, Punta Esmeralda representa, apenas cae el sol, un riesgo para el turista y el local que acude para pasar un buen rato en familia; esto ante el incremento de los robos a mano armada y los cristalazos que ya se están convirtiendo en cosa de todos los días.
En este sentido, Lenin Amaro Betancourt, presidente de la Asociación de Propietarios, Inversionistas y Prestadores de Servicios de la Riviera Maya, lamentó que esta zona, donde el empresariado ha visto una oportunidad de crecimiento, se haya visto afectada por la inseguridad, al estar alejada del centro de la ciudad.
“Tanto la zona de Punta Esmeralda, así como la de la playa de la calle 88 son muy importantes, porque quedaron dentro de la zona de preponderancia turística, al lado hay un gran hotel, por lo cual caminan muchos turistas por esta zona y es importante por ello garantizar una mejor vigilancia, porque si sigue la inseguridad, uno, le pega a los ciudadanos porque va mucha gente local, pero también van muchos turistas, por lo que también nos pega turísticamente hablando, ya que abona a una mala imagen en materia de seguridad pública en Playa del Carmen”, indicó.
Con respecto al distintivo Blue Flag, que recientemente recibió Punta Esmeralda, el empresario consideró que si bien es cierto este galardón tiene que ver sobre todo con la cuestión ambiental, “también turísticamente se puede capitalizar y en este sentido se corre el riesgo de perderlo”.
Además de ello, comentó Amaro Betancourt, la seguridad en Punta Esmeralda debe procurarse aún más, porque allí se localiza una de las playas inclusivas que hay en este destino del Caribe mexicano.
“Tan sólo en Estados Unidos, que es nuestro principal turismo, hay 20 millones de personas con discapacidad y turísticamente dejan buena derrama, porque no vienen solos; entonces, hay que cuidar mucho nuestras playas inclusivas”.
Además de los delitos de alto impacto que se han registrado en Punta Esmeralda, también los fines de semana el ambiente también se enrarece para las familias por las constantes riñas entre personas alcoholizadas que son constantes, que aprovechan la casi nula presencia policiaca.
