Urge funcione el relleno sanitario

 

 Ya no debe haber más retrasos, para poner en marcha el sitio para el destino final de los residuos sólidos (Centro Integral de Residuos Sólidos de Tulum), que se construyó a unos 14 kilómetros al sur de la cabecera municipal con un de inversión de aproximadamente 20 millones de pesos, dice el ciudadano, Javier Peralta Cazares.

“Es impostergable debido a que los desechos del basurero a cielo abierto se encuentran nitratos altamente cancerígenos que se filtran y contaminan los mantos freáticos que donde se abastece a los habitantes de la ciudad con agua potable”, advirtió también Nancy de la Rosa, presidenta de la Asociación Civil Salvamento y Vida Ecológica de Akumal.

“El nitrato es uno de los más frecuentes contaminantes de los ríos subterráneos y cenotes, lo cual debe ser controlado en el agua potable debido a que los niveles excesivos y la posible presencia de otros contaminantes por la práctica de la agricultura y campos de golf donde se usan pesticidas y herbicidas traen bacterias, que en Tulum, es muy común, además de la filtración de lixiviados desde el basurero a cielo abierto”, explicó Nancy de Rosa.

Javier Flores, presidente de la Asociación de Profesionistas de Tulum, recordó que fue el 14 de enero de 2014 cuando el gobierno municipal y estatal, dieron el banderazo de arranque para la primera etapa del Centro Integral de Residuos Sólidos de Tulum, que beneficiará a más de 20 mil habitantes con una inversión de 25 millones de pesos.

Nancy de Rosa, del Grupo Ecologista de Akumal destaca que la ignorancia que reina sobre los métodos de disposición de desechos y los efectos de deterioro ambiental que produce el no disponerlos debidamente, ha hecho que en el estado y en otras partes sean abandonados.

“La basura (desechos sólidos) es infinita, se produce día con día y los problemas que ocasiona el sólo abandonarla implica que en esos lugares dejan de ser útiles, con un tiempo de vida limitado en su papel de basurero y, luego los residuos al descomponerse forman lixiviados que al llover son arrastrados a las aguas subterráneas y las contaminan, al igual que los que sean arrastrados en la superficie contaminarán las aguas superficiales.

“La emisión de malos olores, proliferación de microorganismos, moscas, ratas y demás, contaminación el aire con alta probabilidad de incendios y/o explosiones por formación de gas”, señaló Nancy de Rosa. Por Francisco Canul>Quequi

 

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