Tren Maya, paralelo a la autopista a Mérida

CANCÚN

Por Héctor Bello Guadarrama > Quequi

El tramo carretero Valladolid-Cancún será modificado para formar parte del nuevo trazo de las vías del proyecto del Tren Maya, que conectará hacia la principal ciudad turística de Quintana Roo, y desde donde bajará hacia Tulum, precisó Rogelio Jiménez Pons, director del Fondo Nacional de Fomento Turismo (Fonatur).

Si bien el nuevo ajuste deja fuera a la ciudad de Cobá, esta decisión impactará de manera positiva en 320 hectáreas de áreas vulnerables, donde además el suelo es cavernoso y ponía en riesgo el paso seguro del tren, que ahora seguirá un trazo paralelo al camino que conecta Yucatán y Quintana Roo.

Según trascendió, en un estudio de mecánica de suelos se descubrieron muchas imperfecciones que no hacían viable el paso de tal peso por algunas de las zonas en la circunvalación del municipio de Tulum y la Zona Arqueológica de Cobá.

En ese sentido, determinó que en esa área se encontraron decenas de cenotes y una caverna de 90 metros de diámetro y cinco de espesor.

En conferencia de prensa, el titular del Fonatur precisó que el cambio en los trazos se debía a asuntos estructurales, y no a determinaciones políticas por los muchos amparos que se han promovido para detener el avance del proyecto anunciado por el presidente Andrés Manuel López Obrador.

Según lo establecido en el nuevo ajuste del proyecto, el cuarto de los siete tramos que constituirán el Tren Maya, correrá de Izamal a Cancún, y tendrá una modificación para evitar cenotes y vestigios arqueológicos.

Es por lo que ahora el trazo corre paralelo en la carretera, por lo que habrá de realizarse ajustes de desarrollo urbano, aunque el tramo es una concesión de autopista que administra la empresa ICA, y aún deberán entablar negociaciones y permisos para adaptar espacios a la corrida del tren.

Y si bien la vía está aún bajo resguardo de ICA, Rogelio Jiménez Pons señaló que se dará algún tipo de resarcimiento, aunque no se especificó si será para una ampliación de la concesión u otro tipo de beneficio.

No obstante, las obras deberán programarse para establecerlas en los ejercicios del Presupuesto de Egresos de la Federación para después asignarlos a la mesada federalizada, pero no se estableció si podrá ser ajustada en comisiones para el presente ejercicio anual.

‘Blindan’ construcción

En otro tema, Rogelio Jiménez Pons dijo que el Fondo Nacional de Fomento al Turismo entregó a la Secretaría de Hacienda un «plan B» para que los trabajos del Tren Maya continúen, a pesar de las complicaciones económicas provocadas por el coronavirus en China y las variaciones en los precios del petróleo.

Indicó que lo se busca es «blindar» la construcción del Tren Maya con la participación del sector privado (a la fecha está planteado que los cerca de 140 mil millones de pesos que requiere la obra sean recursos públicos).

El director de Fonatur dijo que entregó a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) un «plan B» para que los trabajos continúen, a pesar de las complicaciones económicas internacionales por la parálisis que vive China por el coronavirus y las variaciones en los precios del petróleo.

«Nosotros tenemos que plantear qué alternativas tenemos para poner a consideración a los que saben de finanzas públicas. Ellos son los que van a tomar la decisión», indicó Jiménez Pons.

En rueda de prensa, donde se detallaron los ajustes hechos al trazo del tren en 50 kilómetros para volver al tramo original, el funcionario dejó claro que ya no hay tiempo para hacer licitaciones bajo la modalidad de asociación público-privada, por ejemplo, aunque no ofreció mayores detalles.

Originalmente, el Tren Maya iba a ser financiado con el 80% de recursos públicos y el resto privado.

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