
¡Todo pasa…todo!
Pasó la siega, terminó el verano, y nosotros no hemos sido salvos. Jeremías 8:20
La liturgia es todo lo que se hace en el culto, si el pueblo es convocado por Dios a adorar, hemos de hacerlo como él nos lo ha indicado; por ejemplo, en Isaías 6, se nos muestra los momentos de la adoración
- Convocación a la adoración Isaías (1-4)
- Arrepentimiento y confesión (5)
- Gratitud y seguridad (6-7)
- Acercamiento a la Palabra (8)
- Respuesta a la Palabra (8)
- Dedicación al servicio (9)
Estos momentos son llenados por los elementos del culto como son, lecturas de la Palabra (una del A.T., una del N.T y una de los evangelios); Oraciones; himnos; salutaciones; colecta; testimonios; sermón; etc.
¡La liturgia del culto comunitario es una adoración a Dios, no es un programa de entretenimiento!
El Adviento es la celebración cultica de la época navideña. Como cristianos no debemos caer en la sutileza de la mercadotecnia, la algarabía sensacionalista y las emociones carnales de esta época. Nuestra mirada bien puede volver atrás, al tiempo de María y José, al Belén, a los ángeles que anunciaron a los pastores el nacimiento del Salvador, a los sabios de orientes que fueron guiados al Salvador por una estrella, etc. ¡Qué bella historia es esa en la que el Emanuel, el Dios con nosotros vino! ¡Eso fue cuando el cielo besó la tierra!
Hoy, hoy vivimos con miedo, con tristeza, lloramos nuestros muertos y nuestros enfermos graves; tememos que en este rebrote de Coronavirus puedan morir mas de nuestros seres querido… o quizás nosotros mismos.
¡Hoy más que nunca, debemos despertar la fe durmiente, hoy, encenderemos nuestra primera vela, vela de la esperanza en los momentos de angustia!
Con la esperanza en Dios de que esta pandemia, también pasará
¡Bendiciones amigos y hermanos del camino, del buen camino de Dios!
Pbro. Carlos César González Cruz.