Sin pistas del asesino de madre e hijo
Cancún. La madre de la joven de 25 años, que fue asesinada junto con su pequeño hijo de cinco años de edad, en el fraccionamiento Ciudad Natura, acudió ante el agente del Ministerio Público del Fuero Común hacer el reconocimiento de su hija y nieto para darles cristiana sepultara.
Envuelta en llanto, sin ganas de vivir por el espantoso caso de su hija y nieto que murieron asesinados la mañana del martes en la Región 260, la mujer pidió a las autoridades esclarecer el crimen. “No quiero que esta muerte quede impune”, “Que agarren al asesino de mis hijos”.
La joven G.J.M.O., y su hijo de cinco años, fueron encontrados asesinados al interior de su casa en el fraccionamiento Ciudad Natura, en la Supermanzana 260, Manzana 54, en la calle Ébano.
G.J.M., fue encontrada tirada junto su cama, en tanto el menor estaba recostado en la recámara, con un cuchillo enterrado en la cabeza.
Presuntamente el pleito entre la pareja comenzó en la sala donde se encontraron huellas de sangre, y posteriormente la primera de las victimas cayó junto a la cama de la recamara.
Los agentes que llevan a cabó la investigación han comentado que el presunto asesino, acabo con la vida del niño en la cama, pues las huellas de este terrible caso quedaron en la habitación.
Fuentes policiales informaron que el doble crimen fue descubierto a las 10:05 horas, hasta donde la policía llegó a raíz de un llamado al 066 y, al entrar a la casa, encontró el cuerpo de la mujer asesinada y el de su hijo.
R.E.O.T., de 47 años, originaria de Minatitlán, Veracruz, quien dijo ser madre de la joven G.J.M.O, de 25 años, originaria de Minatitlán, volvió a sostener que desde el lunes a las 16:00 que su hija fue a buscar a su hijo A.J.F.M, de 5 años, no volvió a saber de ellos.
Ayer después del mediodía los cuerpos de madre e hijo asesinados fueron entregados a la mamá de la hoy occisa y la policía esta tras la pista de la pareja sentimental de la fémina, ya que aseguran la había amenazado de muerte.( Por Ramón Uresti Hernández)
Foto: Ramón Uresti
