Sacrificante, pero necesario
Por Alberto SalazarQuequi
“A nivel boxeo me afecta de manera importante el hecho de tener que quedarme en casa y no tener la posibilidad de salir al gimnasio que es mi zona habitual de trabajo. Es complicada la cuestión de esforzarme más y tener que extremar precauciones al salir a correr, pues tengo que hacerlo de madrugada y en lugares despoblados o por carreteras y extremando medidas, usando máscara de aire con filtro y capas de ropa para reducir de alguna manera el peligro”, señaló el prospecto coahuilense Enrique Contreras.
El brillante talento de los pesos Medios e integrante del equipo de “Cancun Boxing” y Boxing Time Promotions” añadió que a nivel personal, el no poder ir a la escuela le es también bastante difícil, “al igual que tener que dejar mi trabajo para no exponerme ni a mí ni a mi familia”.
El espigado boxeador torreonense agregó: Todos los días combino entrenamiento funcional y sesiones de box para que mi cuerpo no entre en reposo, quizá mi entrenamiento no es el mismo, pero no dejo que pierda intensidad. Por las mañanas hago el entrenamiento funcional y por las tardes las sesiones de box, como ya lo dije, tengo que salir de madrugada para correr.
“El trabajo que solía hacer en el gimnasio lo hago con mi equipo en casa con mi papá apoyándome. Mi padre también me ayuda a mantener mi condición pues él me tiene que llevar a lugares despoblados de madrugada para poder correr”. Y destacó: Tengo suerte de tener un espacio amplio en casa para entrenar de cierta manera cómoda y así poder llevar mi cuerpo al límite.
“Claro, el compartir sparring con un compañero te permite tener un ensayo de la pelea, así permite que mi esquina y mi entrenador detecten detalles que puedo y debo mejorar; sin embargo, por ahora no es posible”.
“Considero que estamos en momentos muy difíciles y llenos de incertidumbre que realmente nadie pensó que tendríamos que pasar. En lo personal es muy frustrante, pues anteriormente ya había tenido una pausa obligada del boxeo por cuestiones de salud y este año yo esperaba volver fuerte; con esto ahora es más frustrante, pues en esta situación no hay culpas ni culpables, todos estamos en pausa y no sabemos cuándo podemos reanudar, también estamos en incertidumbre pues quizá la vida como la conocíamos ya no será igual, ¿quién sabe?”, explicó.
Agrega el invicto peleador lagunero: Con la incertidumbre ser paciente es aún más difícil pero no nos queda de otra. Mi consejo es informarnos y adaptarnos, tomar medidas. Estamos conscientes que hay gente que no puede parar, incluyéndome, gente que tenemos que seguir trabajando, entrenar es parte de mi trabajo y tengo que hacerlo, siempre siguiendo las indicaciones de salud.
“Son momentos difíciles, pero en lo personal pienso que tenemos que seguir trabajando, esto ayuda a despejar la cabeza un poco de las malas noticias, además para estar listos cuando nuestras empresas y promotores puedan reanudar las funciones con seguridad y tener oportunidad de ser llamados”.
Destacó que conoce compañeros que dependen por completo del boxeo, pues es su única fuente de ingresos, “así que sí es necesario reanudar el box, siempre y cuando se cumplan con los lineamientos y se cumplan las medidas de seguridad y prevención y a mí me gustaría participar para volver a mi deporte”.