Sabía que lo asesinarían; Hipólito Mora, exlíder de autodefensas en Michoacán, redactó cartas tras a sufrir atentados
Por Redacción
Hipólito Mora, exlíder de las autodefensas de Michoacán, estaba convencido de que iba a ser asesinado. Y así fue. Tres meses antes de que fuera ejecutado en su natal Michoacán, tras otro atentado en el que uno de sus escoltas resultó herido, escribió una carta para que fuera leída tras su ejecución.
«Que mi muerte no sea en vano. Lo dije en muchas ocasiones, sabía que este día llegaría. Lo dije, me voy a morir peleando. Solo quiero que mi lucha no sea en vano», se lee en el documento.
Mora Chávez, quien tenía algunos meses de cumplir 10 años del levantamiento armado que encabezó en Michoacán, se mantenía en La Ruana, donde nació, se convirtió en campesino y después en el líder de un movimiento armado.
Su equipo de asesores políticos convocó a una reunión de prensa en el hotel Cantera Diez, en el centro de Morelia, Michoacán, donde se reunía de forma cotidiana con reporteros, para leer la carta que Mora escribió para que se leyera cuando fuera asesinado.
“En esta misma mesa, donde estamos el día de hoy, después del atentado que tuvo en marzo, donde él mismo lo dijo, que la vio cerca, que vio muy cerca su muerte, que uno de sus escoltas resultó herido y que en el atentado del día de ayer fallece este escolta”, dijo David Ceballos, amigo y asesor de Hipólito Mora.
Esto dice la carta póstuma de Hipólito Mora
«Que mi muerte no sea en vano, lo dije en muchas ocasiones, sabía que este día llegaría. Lo dije: me voy a morir peleando».
«Sólo quiero que mi muerte no sea en vano, que los michoacanos, que todos presumimos bravura, seamos valientes una vez y acabemos con este mal que nos tiene en el suelo. Que los policías vean que tienen la fuerza para acabar con esto».
«Que el gobierno, el que esté en el momento de mi muerte, se fije en los ciudadanos antes que en sus campañas o en sus bolsillos. Yo nunca acepté sobornos ni intimidaciones, luché sin recibir nada a cambio más que el cariño de la gente».
«Los que no me querían eran los chicos malos, yo estaré con mi hijo Manolo y le diré a la muerte: donde estabas, por qué me huías tanto».
«Que mi muerte no sea en vano, y tanto mi familia como mis amigos y mis fieles seguidores hagan lo que tengan que hacer para que la lucha que yo empecé siga siendo por una causa justa para los ciudadanos».
«Aquí y en el otro mundo soy y seguiré siendo Hipólito Mora Chávez».
Apuntan a ‘Los Viagras’
La Fiscalía General del Estado de Michoacán (FGEM), analiza diversas líneas de investigación sobre el asesinato del exlíder de las autodefensas, Hipólito Mora Chávez.
Una fuente de la Fiscalía informó que la principal hipótesis son las rencillas que mantenía con exintegrantes de autodefensa que ahora forman parte del grupo de sicarios autodenominado como “Los Viagras”, brazo armado de La Nueva Familia Michoacana o Cárteles Unidos.
Mora Chávez fue atacado por al menos 15 sicarios que con dos vehículos le cerraron el paso a su automóvil blindado, propiedad del gobierno de Michoacán, y en el que viajaba con uno de sus escoltas. Cuatro escoltas más lo custodiaban a bordo de una patrulla de la Guardia Civil.
El vehículo del exlíder de las autodefensas se incendió a causa de los impactos de los rifles tipo Barret, por lo que los cuerpos del líder autodefensa y uno de sus escoltas quedaron calcinados.
Hace una semana, Hipólito Mora lanzó un video con un mensaje de ayuda a las fuerzas federales para que ayudarán a su comunidad que vive amenazada y extorsionada por el grupo de “Los Viagras”, sin que se hiciera nada con ese llamado.
Al menos mil disparos
Cerca de mil balazos dispararon a Hipólito Mora y sus escoltas para asesinarlos la mañana del jueves.
Una vez que se practicaron las autopsias de ley, trascendió también que al momento de que la camioneta de Hipólito se estaba incendiando, producto de la explosión de las granadas de fragmentación, el fundador de las autodefensas tuvo que salir de ella para tratar de salvarse, pues ya parte de su cuerpo iba en llamas.
Pero en ese momento, Hipólito Mora recibió un balazo en la cabeza y murió de forma instantánea.
Asimismo, se supo que uno de sus escoltas presentaba tres balazos en la cabeza y, una vez que lo mataron, los homicidas le prendieron fuego, mientras que a un segundo policía tenía dos impactos, y al tercer agente le dieron un tiro en la cabeza.
Personal especializado en materia pericial embaló en el lugar de los hechos cerca de mil cartuchos percutidos calibre 7.62×39, tipo AK-47 ”Cuerno de chivo”, .223 tipo AR-15 y G-3, de los que utiliza el Ejército mexicano.
No fue posible evitar que lo mataran, lamenta AMLO
Por Redacción
El presidente Andrés Manuel López Obrador lamentó el asesinato del exlíder de las autodefensas, Hipólito Mora, quien dijo que ya contaba con protección del estado de Michoacán, sin embargo, “no fue posible evitar su homicidio”.
“Había el antecedente que uno de los grupos que opera en la región estaba queriendo dañar a Hipólito Mora, ya habían ocurrido atentados, había pedido la protección del gobierno, tengo la información que el Gobierno del Estado le daba protección; sin embargo, no fue posible evitar que lo asesinaran”, aseguró ayer.
López Obrador refirió que por las amenazas que ya había recibido Mora, el gobernador Alfredo Ramírez le sugirió salir de La Ruana, pero no aceptó.
“Es muy lamentable lo que sucedió, no deja de preocupar, es muy triste, doloroso, para familiares cuando una persona es asesinada, nosotros lo lamentamos mucho, esto que está sucediendo tiene como antecedente, aunque a veces se olvida, lo que se provocó en el pasado, este es un remanente de la violencia que se auspició y se permitió desde el gobierno de Calderón”, indicó.