
ROMÁN ROSAS CHRISTFIELD. Dinero y Poder
*ALTA DEUDA Y DEPRECIACIÓN DEL PESO
El nivel de deuda para finales de este año sería superior al 50% del PIB, es decir 50 centavos de cada peso, junto a la inquietud por el efecto del tipo de cambio, que en los últimos días ha mantenido depreciada nuestra moneda. Si bien por el momento se considera que el país tiene un balance adecuado, el gobierno mexicano debe poner atención al creciente nivel de deuda, pues de mantenerse un déficit fiscal elevado, habrá un impacto directo en el nivel de endeudamiento, analizó la calificadora crediticia Fitch. El gobierno mexicano fue prudente y responsable en el Paquete Económico 2017 en cuanto a las medidas de un ajuste al gasto público y a la meta de superávit primario. Pocas deudas en el mundo se gestionan como la mexicana, al ser de las que tienen mayor duración y, por lo tanto, es menos vulnerable a incrementos en la tasa de interés. Un 74% está denominada en pesos, lo que reduce su vulnerabilidad frente a fluctuaciones cambiarias. S&P señala que el historial de políticas fiscales y monetarias cautelosas en México ha contribuido a alimentar los déficits gubernamentales y a la baja inflación, además de mantener una deuda externa moderada. La depreciación del peso tiene diversas consecuencias. Las implicaciones negativas del aumento en el precio de los dólares es que exista una sobre depreciación de la moneda, que finalmente afecte a la inflación por la vía de la formación de precios.