
Piden calibrar las básculas
Por Raimon Rosado
Los comerciantes que utilizan para la venta de sus productos, básculas y otros instrumentos de medición, podrían hacerse acreedores a multas de entre dos mil y 300 mil pesos, en caso de no calibrarlas debidamente, bajo las normativas que establece la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), advirtió el nuevo delegado de esta institución en Quintana Roo, Juan Roberto Loya Hernández, quien dio a conocer que desde el pasado mes de enero y hasta marzo, se realiza el período de calibración para dichos instrumentos, que de manera voluntaria deben solicitar los comerciantes; en caso de no efectuarse durante el lapso estipulado, ameritará multas, las cuales se aplicarán a partir del mes de junio.
El funcionario recordó que este período de nivelación para instrumentos de peso y medición, se realiza de manera anual, con el fin de que los comerciantes obtengan su respectivo holograma, mismo que acredita y da certeza a sus clientes de que se les está pesando, midiendo o contando de manera exacta, los productos o servicios que van a adquirir.
Mencionó que deberán acudir: abarrotes, casas de empeños, estacionamiento, gaseras, joyerías, lavanderías, ferreterías, materiales de construcción y eléctricos; panaderías y pastelerías; perfumerías, pescaderías, pollerías, restaurantes, servicio postal, telas, tiendas de autoservicio, tortillerías, entre otros más, están convocados a llevar sus instrumentos de medición para ser calibrados, tales como: básculas, longímetros, relojes checadores o las bombas de gasolina cuando así lo solicitan.
Reiteró que son los propios comerciantes los que llevan a las oficinas de la Profeco, sus instrumentos de medición para ser calibrados, lo que implica un costo de 280 pesos por cada báscula, lo cual les evitará el riesgo de ser objeto de sanciones durante las verificaciones que la instancia de protección a los consumidores iniciará a mediados del presente año.
Dicha solicitud, dijo, puede ser de manera personal en las oficinas de la delegación local de Profeco, o a través de internet.
Si un proveedor incumple con el trámite de calibración, se inmoviliza el aparato de medición para que no siga operando. “Además, si detectamos que no tiene su holograma y parte está pesando o midiendo menos, la sanción puede ser muchísimo mayor. Es una multa, primero por no tener holograma vigente de la Profeco y segundo por entregar menos”, advirtió.