Ordena Pemex recorte urgente de gastos

Frena la paraestatal sus compras creando mayor incertidumbre entre proveedores por su crisis financiera.

Por Lino Zentella
Ciudad de México

El panorama para Pemex se ha oscurecido aún más tras la reciente directiva emitida por Néstor Martínez Romero, director de Pemex Exploración y Producción (PEP), en el oficio PEP-DG-0810-2024, fechado el 11 de octubre.


El documento detalla un mandato claro: contener el gasto para el último trimestre de 2024, lo que refleja la acuciante falta de liquidez de la petrolera nacional, particularmente en lo que resta del año.


Esta contención del gasto, cifrada en $26,800 millones de pesos, ha generado un clima de incertidumbre entre proveedores y contratistas, quienes ya venían enfrentando dificultades debido a los retrasos en pagos y la complicada situación financiera de la empresa. Pemex, la mayor empresa pública del país, busca desacelerar su ritmo de gasto con un enfoque denominado “Medio con impacto a la producción”, que podría afectar varias áreas clave de operación.

Impacto en proveedores y contratistas
La deuda de Pemex con proveedores alcanzó los 362.5 mil millones de pesos hasta el segundo trimestre de 2024, lo que ya venía generando tensión entre sus socios. Este nuevo recorte de gasto añade un nivel adicional de incertidumbre y presión sobre aquellos que dependen de los pagos de la petrolera. Además, la deuda financiera bruta de Pemex, que asciende a 1.83 billones de pesos (equivalentes a 99.4 mil millones de dólares), sitúa a la empresa en una posición vulnerable y con escaso margen de maniobra.

Futuro incierto para Pemex
Se prevé que las medidas actuales tengan repercusiones severas en el presupuesto de 2025, afectando áreas cruciales como el mantenimiento, la continuidad operativa y la seguridad. Estas restricciones complican aún más la posibilidad de que Pemex cumpla con sus objetivos de producción y mantenga la integridad de sus operaciones.


Es importante destacar que, a pesar de los recortes y la contención del gasto, la estructura directiva de Pemex no ha sufrido cambios significativos. La plantilla de subdirectores, por ejemplo, permanece igual tras los últimos ajustes, lo que podría generar críticas adicionales sobre la eficiencia administrativa de la petrolera.


En resumen, la contención del gasto anunciada para el cierre de 2024 es un reflejo claro de los problemas financieros que enfrenta Pemex. Con un 2025 que ya se vislumbra recortado, los desafíos para la petrolera seguirán creciendo, poniendo en jaque tanto su operación como la relación con proveedores y contratistas.

Premisas de la contención
El oficio establece una serie de medidas que Pemex Exploración y Producción deberá implementar de inmediato:

  1. Priorizar intervenciones en pozos basándose en la generación de valor (VPN).
  2. Diferir actividades considerando todos los elementos asociados a las unidades de inversión.
  3. Priorizar el mantenimiento de acuerdo con el nivel de actividad diferida.
  4. Diferir actividades administrativas, afectando personal de apoyo, monitoreo y otros servicios.
  5. Reprogramar actividades del programa de taponamiento de pozos.
  6. Postergar el programa de adquisición sísmica hasta 2025.
  7. Limitar el saneamiento y restauración solo a eventos imprevistos.
  8. Diferir el mantenimiento de caminos y peras.
  9. Postergar actividades con beneficios esperados para 2025.
  10. Postergar convenios con afectación al presupuesto de 2024.
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