No me doblegarán: Katerine Ender
Por Juan Manuel Trinidad
Autoridades del juzgado tercero de primera instancia, en apoyo de la Secretaría de Seguridad Pública llevaron a cabo la ruptura de chapa y lanzamiento del inmueble de la ambientalista, Katerine Ender Córdova, quien señala que esa figura de lanzamiento no existe en el Código Penal, y que nunca fue notificada de un posible desalojo.
En la transmisión que hizo en vivo de la llegada de más de nueve patrullas para desalojarla, dijo que no se rompió la chapa, se arrancó toda la puerta de su vivienda. Expresó que el desalojo se llevó a cabo con más de 40 policías.
El operativo inició a las 16:00 horas de ayer, en la casa de Katerine ubicada en la zona popular de la Región 200, manzana 46 de Real Hacienda del Caribe, Circuito Atenco, en donde diversas unidades de la Policía arribaron, y junto con el personal del juzgado rompieron la puerta, ingresaron y tomaron el control esto ante la impotencia de la ambientalista quien no pudo hacer nada.
Su casa humilde, muestra un modo de vida austero, que contrasta con las acusaciones de riqueza, robo y extorsión que le endilgan sus adversarios y enemigos políticos.
«Es un abuso, ellos dijeron que era «un lanzamiento», y así me lo mostraron de lejitos, porque no me entregaron ninguna notificación. Expresó que su caso es político, que ha ganado derechos por vivir en ese lugar más de 15 años y que por ello se defenderá legalmente hasta las últimas consecuencias. Explicó que son muchos los interesados en atacarla por defender el Malecón Tajamar, pero que continuará con su lucha ambientalista, «no me van a doblegar, no me van a intimidar», apuntó.
La ambientalista se enfrentado a los otros grupos ambientalistas que han borrado de su agenda Malecón Tajamar, y se han dedicado a negociar beneficios con la bandera ecologista. Los empresarios que invirtieron millones de dólares en esos terrenos también están contra ella, además de la iglesia quiere excomulgarla porque quiere construir ahí una gigantesca iglesia de Santa María del Mar.
Cabe destacar que todo ocurrió anteco la mirada de los habitantes, quienes a escondida decidieron grabar lo que sucedía, dando a conocer que fueron más de varias unidades repletas de elementos de la Secretaría de Seguridad Pública. La gran mayoría de los habitantes de este lugar tienen algunas irregularidades y hasta ahora solamente a Katerine se le ha desalojado.
Finalmente la ambientalista fue lanzada a la calle con sus pertenencias, pero señala que interpondrá una demanda pues fueron violados sus derechos. «Si me ven viviendo en Tajamar, es porque no tengo otra opción», finalizó.
