No es momento de reducir jornada laboral: Coparmex
Por Blanca Silva
Tras participar en el Parlamento Abierto para analizar la reforma para reducir la jornada laboral, el Centro Empresarial de Quintana Roo (Coparmex Quintana Roo), advirtió que no es el momento de hacerlo, pues primero se debe elevar la productividad reduciendo regulaciones y trámites administrativos, antes de discutir esa iniciativa.
Además, aseveró que en Quintana Roo los trabajadores dedicados a la actividad turística podrían resultar afectados en sus ingresos, ya que la reducir la jornada laboral implicaría reducir el monto de las propinas que reciben diariamente.
La presidenta de la Coparmex Quintana Roo, Angélica Frías González, confió en que el ejercicio del Parlamento Abierto sirva para razonar que no es el momento adecuado para reducir de 48 a 40 horas la jornada laboral semanal.
Recordó en lo que va del año, las empresas han enfrentado tres aumentos importantes en sus costos de operación debido a los cambios en la política laboral, que fueron el alza al salario mínimo, la reforma para aumentar los días de vacaciones y una mayor aportación patronal a las pensiones.
Por ello, dijo que como sector patronal su postura es que primero se tiene que elevar la productividad en el país, reduciendo regulaciones y trámites administrativos, antes de discutir la disminución de la jornada laboral.
Además, también consideró necesario atender hasta 1.6 millones de vacantes no cubiertas a nivel nacional, mientras existen más de 10 millones de mexicanos no aprovechados en el mercado laboral.
Enfatizó que como Coparmex siempre han estado en favor de los trabajadores, por eso han impulsado el aumento del salario mínimo en busca de su bienestar, que salgan a tiempo y puedan estar con sus familias, pero no en este momento.
Asimismo, anticipó que el beneficio esperado para los trabajadores no sería igual en todos los estados, pues Quintana Roo es un estado con una alta actividad turística, por lo que los trabajadores dedicados a la misma se verían afectados en sus ingresos al reducirse las propinas a la par de la disminución de la jornada laboral.
De esta manera, dejó claro que no es un rechazo, sino que se considere que este no es el momento se aumentar aún más el costo de operación de las empresas sin aumentar su productividad, ya que se podría perder competitividad, que es lo peor que le puede pasar a México en el contexto del “nearshoring”.