
Nelson Cantó: el arte de crear con las manos y el alma
JMM.- En un rincón de su taller, entre piñatas de colores vibrantes y delicadas prendas de hilo contado, Nelson Cantó nos recibe con una sonrisa y manos inquietas, siempre en movimiento, siempre creando. Este apreciado artesano morelense celebra su día como mejor sabe: trabajando.
“El día del artesano lo celebramos con trabajo” comenta con una risa que refleja su pasión por el oficio. Y es que para Nelson y muchos como él, el Día del Artesano no es solo una fecha en el calendario, sino un recordatorio del esfuerzo, la creatividad y la resiliencia que implica dedicarse a este arte.
Afortunadamente, el año ha comenzado bien para los artesanos de José María Morelos. La demanda de productos hechos a mano ha crecido, especialmente en ferias y festividades locales. “En las piñatas nos ha ido bien porque hay cumpleaños todo el año, y ahora estamos haciendo caballitos de cartón para la cabalgata del 21 y 22”, nos cuenta con entusiasmo.
Sin embargo, como en muchas partes de México, el reto del regateo sigue presente. “Mucha gente no le da el valor real a un trabajo hecho a mano. Nos regatean, pero a las grandes marcas sí les pagan lo que piden”, lamenta Nelson. Pese a esto, hay quienes sí reconocen el valor de cada pieza artesanal, entendiendo que no hay dos iguales, que cada bordado o piñata es única, hecha con tiempo, paciencia y dedicación.
El artesano recuerda los momentos difíciles de la pandemia y cómo muchos encontraron en sus propias manos la respuesta para salir adelante. “Benditas son las manos que crean y no destruyen”, expresa con convicción. Su mensaje es claro: la creatividad es un refugio, una forma de resistencia y un camino para descubrir la verdadera pasión.
Hoy, en el Día del Artesano, Nelson Cantó y todos aquellos que, como él, transforman materiales en arte, nos dan una lección de vida: crear es más que un oficio, es una manera de dejar huella en el mundo.