Misa en memoria del capitán Toledo

Por Heiby Morales > Quequi

Ayer, familiares, amigos y conocidos del destacado empresario, Eduardo Toledo Parra, le rindieron un último tributo y adiós, en la misa luctuosa realizada en la iglesia de Corpus Christi, al mediodía en esta ínsula.

Estuvieron presentes en el emotivo servicio la viuda del difunto, Cristel Trujillo; sus hijos, Carlos, Luis y Eduardo Toledo, entre otros familiares y allegados a este pionero de la comunicación en Quintana Roo.

Además de ser fundador del primer canal de televisión por cable en el estado, Toledo Parra fue impulsor del Aeroshow, que por seis ediciones entretuviera a cozumeleños con sorprendentes muestras de habilidad aéreas. Este año, por primera vez se mudó la sede a Cancún y, el viernes pasado, un día antes de la inauguración del evento, en un vuelo de prueba, Eduardo Toledo se estrelló en su monoplaza, falleciendo al instante, en la riesgosa actividad que más le gustaba.

En la misa de despedida, el párroco, Manuel de Jesús Prieto, lo reconoció como un creyente, un buen patrón y un hombre de familia responsable, que siempre buscaba hacer el bien, que es como siempre será recordado.

Aunque su nombre es conocido en todo Quintana Roo, en Cozumel será donde con más intensidad perdurará su recuerdo, se mencionó, por ser donde tenía su lugar de residencia, en los últimos años, además de crear allí varias empresas que dieron trabajo a las familias de la isla.

Eduardo Toledo Parra era yucateco de nacimiento, quintanarroense de elección, ingeniero de carrera y tenía 74 años de edad. Al avecindarse en Quintana Roo, instaló el primer servicio de cable, realizando él mismo las labores de instalación y distribución.

Esta primera empresa, Servicios de Ingeniería Electrónica, pronto ofrecía varios canales de programación, incluido el primero noticiario con contenido local. Esta red creció hasta su encarnación actual como Promovisión del Caribe y Canal 10.

Entre sus otras facetas, destaca su labor al frente del patronato de la Universidad de Quintana Roo y, por supuesto, su pasión de aviador, que lo llevó a construir el aeródromo que lleva su nombre y la creación del Aeroshow. Descanse en paz.

No hay comentarios