
Más quejas contra la Siresol
Empresaria da a conocer cobros excesivos en la paramunicipal.
“Con la aplicación de cobros excesivos por recoja de basura, onerosas multas por incumplimiento en sus disposiciones «legales» de las que no ofrecen razones ni justificaciones coherentes, el sector restaurantero de Cancún ha sido uno de los más afectados con las arbitrariedades y la opacidad con que se conduce la paramunicipal Solución Integral de Residuos Sólidos (Siresol)”, señala la empresaria del ramo gastronómico y ex presidenta de la Cámara de la Industria de Alimentos Condimentados (Canirac) de Cancún,. Gabriela Delgado Tiempo, quien afirma que la concesionaria de recolecta y disposición de la basura, sólo «respeta» en la aplicación de sus cobros, a quien se defiende de sus abusos, a cambio de otras omisiones.
El oscurantismo y arbitrariedad que ha caracterizado la operación de esta instancia, cuyo nuevo reglamento está próximo a ser sometido a aprobación por el Cabildo de Benito Juárez, fue denunciada por la representante de los restauranteros, quien señala que a principios de año, los cobros por sus planes de manejo de residuos sólidos, cuyo valor según la ley es de 20 salarios mínimos. Sin embargo, en el presente año se elevó al doble, sin ningún argumento válido de por medio, además en un claro desapego a los incrementos regulares derivados de la inflación.
«Esto es porque quienes dirigen Siresol, así lo decidieron, porque necesitan dinero, no sé si para sus arcas o para dónde, por lo que primero es necesario hacerse respetar para que a uno le cobren lo justo», indicó Gabriela legado, quien dijo que el empresario que este año «alcanzó a defenderse», le fue respetado el referido cobro de 20 salarios mínimos de un plan de manejo, cuyo documento jamás es entregado.
Otra anomalía radica en el cobro estipulado por cantidad de basura producida, que sin importar los kilos que cada restaurante produzca, ya se aplica un excedente fijo del 20%, ante lo que es casi imposible debatir con ellos, pues se cierran a decir que «la ley así lo establece», cuando muchos de estos cobros, se acurdan en reuniones carentes de trascendencia legal.
Ante ello señala que mientras más uno trata de defenderse, más groseros responden, por lo que el 90% de los contribuyentes, termina pagando lo que Siresol exige mediante la aplicación de represalias, en muchos casos, tales como la retención de licencias de operación, que ante la imposibilidad de ser exhibida a los inspectores, implica multas de por lo menos 5 mil pesos.
Por Raimon Rosado > Quequi
Foto: Raimon Rosado > Quequi