Mantiene Chak Meex un nidito de amor
FELIPE CARRILLO PUERTO
Por Redacción > Quequi
José Esquivel Vargas, «Chak Meex», presidente municipal de Felipe Carrillo Puerto, no sólo cambió a su legítima esposa con quien compartió 20 años de su vida, por una mujer más joven, sino que hasta le puso un departamento con todas las comodidades en Chetumal, presumiblemente a costa del erario municipal.
Mientras la señora Silvia le suplica que no la deje en la calle a ella ni a los tres hijos que procrearon, el edil «rabo verde» tiene su nidito de amor en un departamento, ubicado en la calle Minatitlán, colonia Magisterial de la capital del estado.
Ahí seguramente pasa buenos ratos con una atractiva joven de 22 años de edad de nombre Mónica O.J. (que además es su ahijada de confirmación), sino que sigue sumando a más mujeres a su desenfrenada vida sexual que hace cada vez más visible para sus gobernados. Inclusive, a finales del año pasado, ya como edil, se llevó a pasear a Europa y a América Latina a la joven, con el dinero de los carrilloportenses.
Y es que se filtró un listado con varios nombre de jovencitas a quienes, según, paga por favores sexuales, como es el caso de Karen Analí A. N., alias “La Chola”, de 29 años de edad y con quien tiene un hijo.
Aun cuando su esposa enfrenta un trámite de divorcio promovido por el alcalde de Felipe Carrillo Puerto, debe tolerar que su expareja compre propiedades y se pasee por muchos puntos de la Riviera Maya con un sinnúmero de jovencitas que mantiene en una lista de «aviadoras» en la Comuna carrolliportense, desde donde se han filtrado conversaciones y fotografías de las mujeres que aseguran son mantenidas con el dinero público.
El alcalde, quien ya comienza a ser conocido como el «Alux del Viagra», según tiene amenazada a la señora Silvia para que no se acerque a las instalaciones del DIF y mucho menos a las de la oficina de su «ex».
En tanto, candil de la calle oscuridad de su casa, pues el alcalde anda de nido en nido celebrando a las mujeres, dejando sola a quien le dio tres hijos de un matrimonio que sin importar los sacrificios hechos en dos décadas de vida marital, ni siquiera valieron para darle un trato digno como mujer de un destacado político, que se pasa por el arco del triunfo cualquier situación de buena moral y de familia.
José Esquivel Vargas, se encuentra involucrado en un hexágono amoroso que mantiene con el dinero que debiera ser para atender los problemas más urgentes del municipio rural, que aún sigue careciendo de muchos servicios, que son aplazados porque el dinero de las arcas apenas alcanza para mantener a las mujeres que atienden los favores sexuales que demanda el alcalde conocido como «Chak Meex».
Por ello es que se ausenta de Felipe Carrillo Puerto por varios días disfrutar de su vida promiscua en su «depa de soltero». Y no solamente abandona a la Comuna que desgobierna, sino también a su familia, y sobre todo a su esposa Silvia a quien después de usarla simplemente le dio una patada-