¡Los tacos de guisado llegan con sabor y alegría a José María Morelos!

JMM.- Una emprendedora y sus amigos innovan en el mercado con un menú diferente que conquista paladare.

Hay quienes emprenden por necesidad, otros por pasión, y algunos, como Lenny Marcela Suárez Caamal, por identificar una oportunidad deliciosa. Con una sonrisa contagiosa y una energía inagotable, Leny decidió junto a sus amigos Gaby y Juan abrir un negocio que, a simple vista, parecería sencillo, pero que ha resultado ser un verdadero éxito: tacos de guisado. Sí, esos tacos caseros, calientitos, rellenos de sabores que abrazan el alma.

“No se venden tacos de guisado en José María Morelos, así que pensamos: ‘¡Vamos a intentarlo!’”, relata con entusiasmo. El resultado ha sido más que favorable: desde temprano, las mesas del local lucen llenas de comensales curiosos y felices. “Lo que más gusta, creo yo, es la variedad. Hoy tenemos rajas con crema, pollo con mole, picadillo, pollo encacahuatado, milanesa y hasta tacos dorados de papa. ¡La gente puede elegir como en casa!”, agrega entre risas.

Emprender no fue un salto al vacío. “Sí, hay trámites, permisos, pagos, coordinación con el mercado, fiscalización, protección civil… pero todo se puede si tienes ganas”, explica Lenny, quien además combina este nuevo proyecto con su trabajo profesional en el área de la apicultura. “Siempre me ha gustado hacer algo extra, algo que me motive y me permita compartir algo diferente con la comunidad”, confiesa.

Más que un puesto de tacos, este espacio se ha convertido en un rincón de sabor, de encuentro, de pláticas entre mordidas y de sonrisas al probar el guisado favorito de mamá, pero hecho con el toque especial de Lenny.

En tiempos donde todo parece complicado, Lenny nos demuestra que las ideas sencillas, bien ejecutadas y con mucho corazón, pueden abrirse camino. “Aquí no solo servimos comida, servimos alegría”, concluye Lenny, mientras atiende a otra familia que llega con hambre… y sale con el alma llena, porque en este rincón del mercado ubicado justo al lado de Enfrutados no solo se venden tacos: se sirve identidad, se comparte alegría, y se celebra la posibilidad de emprender desde lo más sencillo y sabroso: el amor por la cocina.