Líder hotelero de Tulum pide regulación para rentas vacacionales y defiende modelo todo incluido
Tulum, 16 de agosto.- David Ortiz Mena, presidente de la Asociación de Hoteles de Tulum, hizo un llamado a la implementación de un marco regulatorio para las rentas vacacionales en Quintana Roo, subrayando la importancia de garantizar la seguridad de los visitantes y evitar un crecimiento desordenado en esta modalidad de hospedaje.
El líder hotelero enfatizó que «el sol sale para todos, pero se debe avanzar con orden», al señalar que la proliferación descontrolada de las rentas vacacionales está generando problemas significativos en los destinos turísticos de la región.
Entre las preocupaciones mencionadas, destacó el incremento en el costo de la vivienda y los riesgos de seguridad que conlleva alojar a turistas en zonas no aptas.
También expresó que existe una marcada diferencia entre los empleos y la derrama económica que genera una habitación de hotel en comparación con un departamento ofrecido en renta vacacional.
Asimismo, advirtió sobre el riesgo de “masificación” en los destinos turísticos, no tanto por los hoteles “todo incluido”, sino más bien por la falta de regulación en las rentas vacacionales.
“El que se les cobre impuestos, no es lo mismo a que se les regule”, aclaró Ortiz Mena, al recalcar la necesidad de un marco normativo claro y efectivo para esta modalidad de hospedaje.
En ese sentido, comparó el desarrollo gradual de la infraestructura hotelera en Quintana Roo, que ha tomado cinco décadas para alcanzar las 130 mil habitaciones, con el crecimiento acelerado de las rentas vacacionales, que ya suman 52 mil registros en pocos años, muchos de ellos consistentes en múltiples habitaciones o departamentos.
Ortiz Mena mencionó que el propósito original de las rentas vacacionales era permitir a los propietarios obtener ingresos adicionales, pero que ahora se han convertido en un negocio masivo para algunos, con la construcción de edificios enteros dedicados exclusivamente a este fin. Este fenómeno, advirtió, está elevando el costo de la vivienda y contribuyendo a su escasez en un estado que ya enfrenta un déficit habitacional.
«Merman la calidad de vida de los quintanarroenses», declaró Ortiz Mena, sugiriendo que se investigue si los dueños de estos edificios son realmente del estado.
En contraste, Ortiz Mena defendió el modelo de hotel «todo incluido», que ha sido un pilar del éxito turístico de Quintana Roo, atrayendo a 30 millones de visitantes al año. Destacó que esta modalidad permite recibir a un gran número de turistas de manera efectiva, contribuyendo significativamente a la economía local.
En Tulum y en todo el estado, la oferta hotelera es diversa, incluyendo hoteles «boutique», centros de hospedaje de plan europeo y establecimientos «todo incluido».
Ortiz Mena subrayó que esta diversidad permite captar distintos tipos de turismo, generando empleo y derrama económica. Aunque reconoció que las rentas vacacionales también tienen su lugar, insistió en la necesidad de mitigar sus efectos negativos y regular su crecimiento.
Al referirse al desarrollo de nuevos destinos turísticos y la expansión de los ya existentes, abogó por un crecimiento sustentable que respete el medio ambiente y garantice la provisión de servicios básicos, incluida la vivienda.
«No es necesario criticar un modelo que tanto éxito ha traído al estado, como es el todo incluido», concluyó.