Lastiman a usuarios
Por Francisco Canul
Tulum.-Debido a que el conflicto entre transportistas foráneos de los sindicatos taxistas “General Francisco May” de Felipe Carrillo Puerto y “Tiburones del Caribe” de Tulum, está afectando gravemente a los usuarios, quienes incluso son víctimas de jaloneos, falta de respeto y demás agresiones físicas, a pesar de que muchos son adultos mayores. El pasado sábado exigieron a las autoridades de Gobierno del Estado, solución y se garantice no solo el libre tránsito si los derechos y la tranquilidad de la gente que viaja.
Y es que personas como una indefensa mujer de la tercera edad, reclamó sus derechos a los taxistas de Tulum quienes la habían obligado a bajare de una combi foránea, exige a las autoridades como la Secretaría de Infraestructura y Transporte (Sintra), incluso a la Policía Federal, justicia y hagan valer la ley.
No son pocos los pasajeros que condenan las acciones de los transportistas de los sindicatos taxistas “General Francisco May” de Felipe Carrillo Puerto y “Tiburones del Caribe” de Tulum, y exigen a la Sintra y Policía Federal se hagan cargo del buen funcionamiento tanto de las concesiones como del uso de la vía, ya que donde bajan a los pasajeros con jaloneos es un tramo federal, aunque está dentro de la mancha urbana de Tulum.
El pasado sábado propios y extraños pudieron darse cuenta del comportamiento de los taxistas, y al mismo tiempo como es que todos y cada uno de los usuarios afectados reclamaban sus derechos, a quienes los transportistas llevan ‘entre las patas’ por el conflicto que abanderan los líderes sindicales de Tulum y Felipe Carrillo Puerto.
Con las imágenes más que elocuentes es innegable el vacío de las autoridades de la Sintra y Policía Federal, quienes debieran estar presente en todos estos hechos para prevenir, para garantizar también que unos ni otros se agredan, que los ciudadanos puedan viajar con seguridad.
Y que los transportistas de Tulum y Felipe Carrillo Puerto que se disputa el tramo taxistas dirimen su pleito como están acostumbrados, con la ‘ley del garrote y época cavernaria’, pero sin afectar a quienes les dan de comer, en este caso los usuarios.