La oleada de low cost al Caribe amenaza a los touroperadores
La touroperación clásica al Caribe puede verse amenazada por el ‘boom’ de low cost que están aterrizando en los principales destinos vacacionales del Caribe, como Cancún, Punta Cana y Cuba. Estas aerolíneas potencian la venta propia, y el cliente tiene así más a mano montarse su viaje por su cuenta con OTAs y DMCs que incluyan el traslado y el alojamiento.
Desde hace unos años, las low cost desde Norteamérica vienen creciendo en el Caribe, como Jetblue o Air Canadá Rouge, así como Westjet, Southwest, Frontier o Spirit, cuya pujanza ha ido acompañada de incrementos en la venta de viajes a los destinos a través de OTAs sobre todo como de Expedia, en lugar de con los touroperadores clásicos.
Ahora, una nueva oleada de low cost aterrizan en el Caribe, y esta vez proceden de Europa y de Latinoamérica, que es el mercado que más crece hacia la región. Desde el Viejo Continente arrancarán Norwegian, Level y Eurowings, mientras que Wingo o Interjet se sumarán en la zona a Azul y Gol desde Brasil.
La irrupción de Airbnb y de HomeAway también se está haciendo sentir en el Caribe, y los hoteleros citan a las viviendas particulares como uno de los motivos del estancamiento que vienen registrando desde hace unos meses, como ha venido detallando REPORTUR.mx, el digital turístico latino líder.
En México las low cost locales ya dominan gran parte del mercado hacia los destinos vacacionales como Cancún y también los del Pacífico, con Volaris o VivaAerobus más asentadas, mientras este último grupo ultima el lanzamiento de otra compañía de bajo coste en Perú que se sume a la que ya funciona en Colombia con notable penetración.
Estos cambios en la forma de viajar al Caribe van a obligar a las mayoristas a reinventarse en sus paquetes cerrados, con ejemplos de acusadas bajadas en determinados operadores como Travelplan a lo largo de los últimos años, en contraste con su receptivo Welcome Incoming, que como reveló preferente.com quieren potenciar.
Pero no solo los touroperadores clásicos van a verse afectados de las nuevas tendencias de comercialización también hacia destinos más lejanos, sino las propias cadenas hoteleras van a tener que adaptarse a una mayor dependencia de los DMC, como bien vienen haciendo por ejemplo desde el Grupo Piñero con Coming2 o desde Barceló con Jotelclick.
Las low cost, no obstante, también tienen efectos positivos para los touroperadores clásicos, pues así disponen de más oferta al Caribe y por tanto más capacidad para abaratar los paquetes, pero mantener esta fuerza con los hoteles puede que con el tiempo se torne más complicado una vez que su cuota con ellos vaya menguando.
(Reportur)