LA DIOSA IXCHEL. El Castillo
SE COCINA GABINETE
El enigma siguiente es el gabinete estatal, el nombre de cada uno de los hombres que acompañarán a quien será el gobernador a partir de las primeras horas del 25 de septiembre. Todas las posiciones son importantes a ese nivel, de ahí que las expectativas se despierten y se centre la atención en aquellos con los que habrá de tenerse relación directa de acuerdo al ramo o sector de desempeño. Se habla de la integración de perredistas, aunque los panistas hacen valer los votos otorgados y, por lo tanto, presumen obtendrán los mejores cargos. Se habla de unos y otros insistentemente, sobre todo porque no hay rostros ni trayectorias desconocidas y algunas, para su mala fortuna, muy conocidas y no precisamente de la mejor manera.
Es también tema recurrente la contratación de priistas quienes, sin dejar de decirse militantes de ese partido, sostienen ayudaron a lograr la victoria de la alianza por su necesidad de provocar un cambio. Su misma contratación niega lo que supuestamente formó parte de esa lucha. Si no es con unos o con otros, o los de enfrente, ¿con quién? Se supo, en su momento, de la participación y exposiciones varias de colegios y barras, entre ellos las de arquitectos, ingenieros, abogados, médicos, etcétera, frente a los entonces candidatos al gobierno. Parecería que es ahí, con los profesionistas sin una militancia marcada, en donde se encontraría a los llamados “mejores hombres y mujeres” para desempeñar la labor en las dependencias en donde se finca la eficiencia de un gobierno.
La barra y los colegios de abogados cuentan con afiliados seguramente poseedores de los requisitos impuestos para el cargo, por ejemplo, de procurador de Justicia del estado. Son quienes manejan las leyes y se enfrentan a diario con los vicios y las corruptelas de barandillas y tribunales, los que mejor conocen en dónde aprietan los zapatos. Ni qué decir de ingenieros y arquitectos. La fisonomía urbana de los puntos de mayor atracción turística todavía es rescatable pero, también, estos profesionistas conocen de la tramitología, del llenado de un sinnúmero de requisitos para conseguir licencias de construcción y lo que se requiere para cualquier tipo de obra. Sólo en estas dos profesiones pueden encontrarse rostros nuevos y con experiencia probada del otro lado del escritorio, la cual cuenta más que la lograda con la carga de mañas y paga.
Varias promesas giraron en torno al otorgamiento oportuno y eficaz del servicio médico. Se siguió el guión de Miguel Ángel Mancera proponiendo “médico en tu casa”. En este sector también sobran los galenos con una experiencia a toda prueba, una que permita se alcance la instalación de un arbitraje médico sin dudas sobre sus sentencias, buscando se haga justicia para los ciudadanos que reciben un mal diagnóstico o se abusa de sus bolsillos con operaciones innecesarias. Ni qué decir de la certificación para cirujanos plásticos y el registro de médicos para evitar ejerzan la profesión ejemplares expulsados de otras entidades que llegaron a Quintana Roo a causar daños y desfiguros.
Si se desea apoyar al campo, recuperar lo perdido, parecería imprescindible contar con un ingeniero agrónomo. Los titulados en relaciones internacionales llenarían la cartera de Economía. Quienes obtuvieron licenciatura especializada en el conocimiento de las leyes de medio ambiente, también tienen cabida. Si se busca el lugar óptimo y adecuado para el nombramiento de quienes cuentan con especialidades que facilitan el manejo de las dependencias que se les asignen, poco será lo imposible. Volver al pago de facturas partidistas, al amiguismo, al compadrazgo, a las clásicas recomendaciones, hará realidad el dicho: No hay platillo nuevo si se hace con la misma cocinera, iguales ingredientes y recetas semejantes.
