La crianza de borregos es una alternativa sostenible para las familias

En el contexto de la economía rural, la crianza de borregos se presenta como una alternativa viable y accesible para las familias que buscan solventar sus necesidades básicas. Eliodoro Mex Colli, un experimentado avicultor con varios años dedicados a esta actividad, asegura que la ovinocultura es una labor que, aunque demanda esfuerzo, no es excesivamente pesada y puede realizarse con éxito si se trabaja con dedicación.

«Los borregos son animales que se adaptan a diferentes tipos de hierba, lo que facilita su alimentación, y no requieren grandes extensiones de tierra para su cuidado», explica Mex Colli. Esta actividad, según él, se puede llevar a cabo incluso en una hectárea de terreno, convirtiéndose en una fuente de subsistencia estable para las familias rurales.

El precio actual de un borrego joven oscila entre mil quinientos y dos mil pesos, lo que demuestra que, bien manejada, la ovinocultura puede generar ingresos suficientes para cubrir los gastos de un hogar. Mex Colli recuerda que, en el pasado, la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (SAGARPA) impulsó significativamente este sector, y sugiere que sería beneficioso retomar el apoyo a las actividades pecuarias, dado su potencial para el desarrollo económico del municipio.

«Dedicar tiempo y esfuerzo a la crianza de borregos es una opción que debería considerarse seriamente, especialmente en la situación económica actual. Sin embargo, es fundamental que se faciliten recursos para la excavación de pozos, ya que la falta de agua puede convertir cualquier esfuerzo agrícola en una pérdida», concluye Mex Colli, quien también señala que desconoce si existen programas específicos en la actualidad que apoyen la ovinocultura.