La Competencia Presidencial: Por una #SociedadHorizontal
Armando Ríos Piter
Falta tiempo para la elección. Aunque todos los ánimos están caldeados, aún deberán correr 11 largos meses, para que se celebren los comicios más importantes de la historia reciente. relevantes por su magnitud, con miles de cargos que habrán de elegir los votantes, pero, sobre todo, trascendentes por la tensión que se avecina de cara a las urnas.
La aparición en escena de Xóchitl Gálvez, ha aglutinado a un amplio sector de la población que no se veía representada ni competitiva en el espectro político. Fresca y carismática, ha logrado encender la esperanza de quienes veían con poco atractivo al llamado Frente Amplio Opositor. Su presencia en escena, ha alentado la posibilidad de que incluso el Movimiento Ciudadano se sume a una gran alianza anti-obradorista, lo que podría poner en serias dificultades a quien encabece el bloque oficialista.
Por otro lado, el engrosado músculo de Morena y aliados, mantiene una amplia presencia nacional. La amalgama entre el modelo de comunicación presidencial directo a la base y la conglomeración de amplias organizaciones sociales descentralizadas, le han dado al partido en el gobierno una sólida competitividad electoral. Aunado a ello, el uso de programas sociales y las 23 gubernaturas que detenta, constituyen un cuerpo de enorme capacidad comicial.
Si pudiéramos hacer una alegoría del momento actual, podríamos identificar a estos dos equipos, como dos competidores que empiezan a entrenar para hacer una carrera de maratón. Tienen fortalezas, pero también debilidades. De cómo logren ejercitar durante los próximos meses, dependerá su desempeño rumbo al primer domingo de junio en 2024.
Por un lado, el Frente Opositor cuenta ya con una cabeza lúcida, visible y atractiva. Aunque la decisión no está tomada, el largo y tortuoso proceso interno que definieron para elegir a su candidato/a presidencial, seguramente terminará con Xóchitl como candidata. No obstante, ese competidor tiene un cuerpo débil y enfermo. La anemia crónica que sufre el PRD, el Alzheimer que prevalece en el PAN y los múltiples tumores cancerígenos que representa el PRI, son todas representaciones fehacientes de lo que la sociedad mexicana rechaza de los partidos políticos.
Cuando se le ha cuestionado por la calidad ética de varios personajes que estarán a su lado en este esfuerzo, hasta el día de hoy, Xóchitl se ha reducido a decir que “ella responde por ella”. Esta respuesta no será satisfactoria en los próximos meses. Una buena cabeza no basta para garantizar que el cuerpo entero -altamente cuestionado por sus elementos constitutivos- funcionará bien en el gobierno.
Por otra parte, aún cuando el cuerpo de Morena se aprecia en buenas condiciones y bien ejercitado, la selección de quien lo encabece determinará en gran medida que tan buena o mala competencia pueda dar. Por un lado, el escaso carisma de Claudia Sheinbaum empieza a pesar. La cargada que en principio se arrojó a arroparla, el uso escandaloso de recursos y acarreo, han generado duras críticas por parte de los propios integrantes del movimiento. La presencia cada vez más notoria de actores “acomodados”, que buscan mantener sus prebendas e intereses, genera dudas sobre la forma en que esa cabeza podría dirigir un cuerpo que ha reiterado que busca hacer las cosas de manera diferente.
En síntesis, el Frente Opositor tiene un cuerpo débil y raquítico, pero con una cabeza que puede ser brillante. Por otro lado, Morena tiene un cuerpo sano, aunque con el riesgo de que esos síntomas de enfermedad, carcoman vertiginosamente su salud. La cabeza será fundamental para evitar que ello ocurra. Mientras que sobre el Frente Opositor pesará la sombra de “pretender utilizar” a Xóchitl como un elemento que enmascare, los intereses de la “antigua oligarquía”, así como de los intereses clientelares y corporativos de siempre; del lado de Morena flotarán los fantasmas de la “nueva oligarquía”, la cargada y las clientelas.
Hoy la falta de debates en el proceso del partido guinda, las sospechas de sesgos pagados en las encuestas e incluso de dados cargados en los órganos internos, son riesgos que Morena debe atender, para definir a quien mejor pueda encabezarle. En el Frente, la selección de personas no cuestionadas, la transparencia sobre quienes conformarán ese equipo, mas allá de quien encabece, así como la evidencia puntual de que no se pretenderá beneficiar a los mismos de siempre, son indispensables. En ambos casos, la #SociedadHorizontal habrá de estar atenta y exigente.