La influencer dio a conocer su versión del robo millonario del que fue víctima en París en 2016.
Por Agencias Francia
Kim Kardashian se presentó en el Palacio de Justicia de París para dar testimonio en el juicio por el robo millonario que sufrió en 2016, durante la Semana de la Moda.
Acompañada de su madre, Kris Jenner, la empresaria recordó con lágrimas en los ojos la noche en que cinco hombres armados irrumpieron en su habitación de hotel.
La sortija de compromiso robada de 18.88 kilates, valorada en 4 mdd y que no pudo ser recuperada.
La declaración se dio en el marco del proceso judicial contra los responsables del violento asalto. Kim Kardashian relató el miedo que vivió aquella noche, cuando pensó que iba a morir.
El robo ocurrió en octubre de 2016, mientras Kim Kardashian se hospedaba en el “Hotel de No Address”, en París. En plena Semana de la Moda, cinco delincuentes disfrazados de policías entraron a su suite, la ataron y la amenazaron con armas. Los asaltantes sustrajeron joyas valuadas en cerca de 10 millones de dólares.
Entre las piezas robadas se encontraba un anillo de compromiso de 18.88 quilates regalado por su entonces esposo, Kanye West, valorado en 4 millones de dólares.
También le quitaron dos brazaletes Cartier, un collar Jacob con oro y diamantes, un reloj Rolex de oro y otros objetos de gran valor económico y sentimental.
Aunque la mayoría de las joyas no fueron recuperadas, un transeúnte encontró en la calle una cruz con seis diamantes, que fue entregada a la policía. Ese fue uno de los pocos objetos que volvió a manos de las autoridades.
Testimonio A casi nueve años después del incidente, Kim Kardashian declaró ante el tribunal. Describió cómo fue atada y amenazada mientras los ladrones exigían sus pertenencias.
“Pensé que iba a morir”, confesó la empresaria, quien dijo haberse sentido completamente indefensa.
“Estaba segura de que me iban a violar. Pensé en mi hermana, pensé que entraría y me vería muerta a tiros, y que ese recuerdo le quedaría grabado para siempre”.
Añadió que el asalto transformó por completo su sentido de seguridad.
“Cambió mi forma de sentirme segura en casa. Ahora tengo entre cuatro y seis guardias de seguridad para sentirme segura. No puedo dormir por la noche si no hay varios guardias de seguridad”, dijo.
Kardashian agradeció a las autoridades francesas por haberle permitido contar su versión de los hechos.
Tras dar su testimonio, Kim abandonó el Palacio de Justicia.
También afirmó que la experiencia le hizo replantearse la manera en que comparte información personal en redes sociales.
Delincuentes En total, 10 personas enfrentan cargos por el robo a Kim Kardashian. Cinco de ellos, ya mayores de edad avanzada, forman parte del grupo conocido como “la banda del abuelo”, un colectivo delictivo con antecedentes y un meticuloso modo de operar.
Uno de los acusados es Yunice Abbas, de 72 años, quien admitió su implicación y hasta publicó un libro donde narra los detalles del crimen.
Otro involucrado es Aomar Aït Khedach, señalado como el líder de la banda, quien desde prisión envió una carta pidiendo disculpas a la víctima.
El proceso judicial es ampliamente seguido tanto por la audacia del crimen como por la exposición pública de una de las figuras más conocidas del entretenimiento.
Pese a estas confesiones, la mayoría de los acusados niega cualquier responsabilidad. Si son declarados culpables, podrían enfrentar penas de hasta 30 años de prisión.
El juicio, que ha captado la atención mediática internacional, se espera que concluya a finales de mayo.