Hartazgo en el PRI, por King
Por Mayra Cervera > Quequi
Las erráticas decisiones de Raymundo King de la Rosa, presidente estatal del Partido Revolucionario Institucional (PRI), generaron que Eduardo Ovando Martínez y otros 300 militantes históricos causaran baja del padrón de esa fuerza política en la entidad.
En días pasados, Alondra Herrera Pavón, secretaria general del Comité Directivo Estatal, intentó justificar el éxodo, diciendo que 200 renunciaron y otros 100 fueron detectados haciendo campaña por otros partidos, lo que dejó explicita la “cacería de brujas” dentro del tricolor.
Lo cierto es que las críticas dentro del PRI crecen día a día y ya es casi unánime el reclamo para que Raymundo King sea expulsado de la dirigencia estatal, pues ha dejado el partido a la deriva, al grado de que se han dejado de pagar las rentas de los edificios, además de los servicios de luz y agua, por lo que no se descarta que se trate de un desvío de recursos.
Aunque se ha alegado que la actual crisis económica en el tricolor se debe a que gran parte de la militancia ha dejado de pagar sus cuotas (otra señal del hartazgo hacia King y del abandono en que está el partido), lo cierto es que el Revolucionario Institucional es de los institutos políticos que más prebendas recibe, tanto a nivel nacional como estatal.
La desatención al partido y la cerrazón de King de la Rosa hacia quienes piden que se abra un periodo de reflexión y se renueve el partido han hecho que muchos prefieran abandonarlo, como sucedió con Eduardo Ovando y Arturo Castro.
Se menciona que existen muchos otros cuadros que también están considerando abandonar las filas del tricolor, de no darse un cambio, que pasaría por la renovación de la dirigencia estatal.
Cabe destacar que ya se juntaron las firmas necesarias para exigir este cambio y, de acuerdo a ex presidente municipal de Benito Juárez, Carlos Cardín Pérez, éste ya fue aceptado.
Al respecto, Alondra Herrera Pavón dijo que sólo están a la espera que la dirigencia nacional les dé instrucciones y, en caso de que se ordene elegir a un nuevo presidente del partido, acatarlo de manera inmediata.
