GERMÁN GALLEGOS CRUZ. Mesa De Las Nauyacas

 

CAIGA QUIEN CAIGA

 

 

Atento recado a Pepe Gómez, presidente del Grupo Quequi.

 

Amigo presidente, «caiga quien caiga» cuando escuche esta frase, hice conexión con otra  de igual virulencia: Hasta las últimas consecuencias. Y siempre me ha parecido una expresión desesperada, que al final de cuentas no encuentran al destinatario.

Cuando Carlos Joaquín era candidato a gobernador por el estado de Quintana Roo, y expresó como deseo muy sentido pedir cuentas claras a su antecesor, palpé dicho deseo como una estrategia para allegarse simpatías. Pero si como gobernador electo, no quita el dedo del renglón sobre el bochornoso tema, entonces va en serio contra las probables irregularidades.

Antenoche lo escuché decir en un mitin de agradecimiento en Tulum, que entre tantas cosas prometidas, hay una de extrema importancia: ¿Dónde quedó el dinero de los quintanarroenses? “No debo aceptar que delitos graves queden impunes”, aseguró.

“Les prometí auditar las dos administraciones anteriores y lo voy hacer; es un compromiso que hice con ustedes. Me queda muy claro, que ustedes votaron por cambiar las cosas, por encontrar el camino de la justicia, de la equidad, de un Quintana Roo más parejo. Con su voto, ustedes rechazaron el despotismo, el autoritarismo, la amenaza, la corrupción, y por supuesto no les fallaré. Lo dije en campaña como candidato y lo digo ahora como gobernador electo; vamos auditar las dos últimas administraciones estatales y las administraciones municipales salientes, tope donde tope, y vamos a aplicar la ley donde se tenga que aplicar, sin abusos, pero con firmeza, caiga quien caiga”.

La reiteración de llevar a juicio a los culpables del saqueo, arrancó un alarido de emoción al público presente, que chorreaban de sudor por el ecuatorial calor, y pese al infame purgatorio, la gente no dejaban de exigir a coro: cárcel, cárcel, cárcel, para los malos gobernantes, repetían como efecto de un eco ensordecedor. Era el momento de escupir los rencores, era la oportunidad de decir, lo que por miedo o precaución no se dijo. Un grupo enorme de ciudadanos quintanarroenses, se despojaron del miedo a la represalia gubernamental y siguieron a Carlos Joaquín hasta llevarlo al triunfo electoral, ellos están aquí para escuchar el mensaje de gratitud del gobernador electo. No fue austero en el discurso de agradecimiento, el gobernador electo hizo un recuento de la histórica lucha, explicó en detalle los pormenores del día de la votación y a cada quien le entregó la promesa de cumplir punto por punto lo que ustedes me han demandado. Abundando en la gratitud, les dijo: No ganó Carlos Joaquín, no ganaron los partidos políticos que me dieron cobijo; ganaron ustedes, ganó Quintana Roo.

La emoción no bajaba de tono, los aplausos espontáneos, las estridentes consignas, los «fueras Romi” y los vivas a Jorge Portilla, se turnaban, solo en espacio para agarrar resuello. Creo que la esperanza goza de buena salud, estamos a un poco más de tres meses de ir al lugar de los hechos y saber si Carlos Joaquín puede echar andar la máquina del progreso, del desarrollo social, de la justicia pronta, etcétera, con los ínfimos recursos que encontrará en la caja del tesoro estatal. No deja de ser una suerte de incógnita. ¿Arrancará la máquina?

 

¿OTRA MANCHA MÁS AL TIGRE?

 

El municipio de Solidaridad, pretende pintarle una mancha más al tigre. Como los políticos son campeones de la «retórica» usan una serie de recursos oratorios, para confundir a la gente y hacerles creer que la pretensión de pedir un «pequeño» préstamos de $1,030,000,000. 00, joder, ¿así se escribe? En realidad no es un préstamo, dijo el presidente de la Gran Comisión del Congreso local, Pedro Flota Alcocer, Solo se trata de reestructurar la deuda anterior, total que en la intensión de justificar un préstamo más, le medio explican a la gente sus razones sin sustento, que no convencen a nadie de las supuestas bondades del enésimo “empréstito”. La realidad, es que hoy por hoy, el municipio de Solidaridad es el quinto más endeudado a nivel nacional. Razón le sobra a la gente para estar molesta. Tremendo enredo es la deuda con bancos y proveedores del municipio solidarense.

Si se llega a concretar este nuevo préstamo, dejarán en «bancarrota» las finanzas municipales. Como es posible se haya llegado tan lejos en el saqueo de las finanzas de este municipio. Por ahí anda Filiberto Martínez con las alforjas bien llenas, sin que nadie le moleste, a pesar de sus cuantiosas propiedades, que jamás podrá justificar. Decía en uno de sus eslogans publicitarios de campaña que venía por más. Cuanto cinismo-, Dios no permitió que este pequeño bandolero se volviera sentar en la silla del poder municipal. Obviamente no es el único culpable del saqueo, hay que revisar desde donde empezó el cruel endeudamiento. Parece que con la  llegada del nuevo gobernador, muchos cosas turbias tendrán mejor color, y entonces sabremos la verdad sobre este criminal endeudamiento. Como ciudadano le tomó la palabra al nuevo gobernador. Tope donde tope y caiga quien caiga.

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