Fue un desfile angelical
El regreso de la marca estuvo plagado de celebridades e invitadas de diversos ámbitos.
Por Agencias
Estados Unidos
El desfile de Victoria’s Secret regresó tras un paréntesis de seis años. Las modelos más destacadas hicieron acto de presencia en Brooklyn Navy Yard, donde se celebró el desfile.
Las hermanas Hadid, Anok Yai, Imaan Hammam y He Cong, representaron a las “it girls” del momento, mientras que los ángeles de siempre, como Alessandra Ambrosio, Doutzen Kroes y Behati Prinsloo, volvieron a ponerse las alas.
La sorpresa de la noche la dieron Kate Moss, que debutó en la pasarela de Victoria’s Secret a sus 50 años, acompañada de Carla Bruni (56), Tyra Banks (50) y Eva Herzigova (51), en un intento de la firma de lencería por cumplir su promesa de presentar una visión más diversa e inclusiva en su pasarela.
Evidentemente, se trató de un cambio bien recibido por el público: algunos de los mayores aplausos de la noche fueron para Paloma Elsesser, una de las pocas modelos con curvas que se mantienen en la pasarela de la Semana de la Moda, Ashley Graham y la modelo trans Alex Consani.
La marca hizo todo lo posible para causar sensación con su regreso: transportar a los asistentes al desfile en un barco con el logotipo de Victoria’s Secret a la hora dorada, regalar minibotellas de Moet y bolas de helado Smize & Dream de la propia Tyra, y contratar no a una, sino a tres grandes artistas: Lisa, Tyla y, más tarde, el icono en persona, Cher para que actuaran durante el desfile. Incluso el Empire State Building se iluminó con el rosa característico de la marca de lencería.
En la alfombra roja previa al evento, celebridades como Cher, Olivia Culpo y la influencer Remi Bader también asistieron para mostrar su apoyo a los modelos. La multitud se vio sorprendida por la llegada de figuras como la gimnasta olímpica Suni Lee y Madison LeCroy.