Espectacular regreso a los escenarios
Ciudad de México
Agencias Quequi
Eran las 20:57 de la noche y justo cuando empezaron a sonar los primeros acordes de “Si te vas” y se escuchó la voz de Luis Miguel interpretando la primera estrofa de esa canción, las 10 mil personas reunidas para verlo estuvieron de acuerdo: ‘El Sol’ volvió a salir.
Bronceado, delgado, sonriente, y vestido de traje negro y camisa blanca fue como el cantante enfrentó al público que tenía casi dos años de no verlo. Sus seguidores querían constatar que todavía hay Luis Miguel para rato, que su voz seguía exactamente igual y que su carrera no había terminado por los problemas económicos y legales que ha tenido a lo largo de casi tres años.
Esta vez, “El Sol” no se fue a los 20 minutos de iniciado el show; tampoco se mostró apático con su público; el Luis Miguel de ahora fue muy distinto, el ídolo se emocionó por regresar y lo hizo con todo. Si no saludaba de mano a quienes se acercaban, decía hola a la gente de arriba o de abajo. Él bailaba y disfrutaba. “Tengo grandes motivaciones para regresar. Una es la música y la otra son ustedes”, confesó a sus fans a la media hora de haber iniciado el concierto, lo que hizo enloquecer a sus fans.
Para fortuna de muchas, Desirée Ortiz brilló por su ausencia. En cambio, en las primeras filas estaban, Toño Mauri y Karla Alemán, Rafael Herrerías y Alejandro Basteri, hermano del Sol.
Como era de esperarse, Luis Miguel también cantó (y bailó) con mariachi algunas canciones de su más reciente disco, como “Llamarada”, “La fiesta del Mariachi” y “No discutamos”; también cantó acompañado únicamente de un piano algunos boleros como “Por debajo de la mesa” o “No sé tú”.