Empresarios solicitan un módulo del SAT en José María Morelos para facilitar trámites fiscales
JMM.- La falta de un módulo del Servicio de Administración Tributaria (SAT) en el municipio de José María Morelos está afectando a comerciantes, empresarios y productores locales, quienes enfrentan dificultades para realizar sus trámites fiscales. Ante esta situación, la Cámara de Comercio (Canaco) y el Frente Cívico de Quintana Roo han comenzado a organizar una base de datos para gestionar la visita de personal del SAT.
David Gómez Tox, contador y presidente del Frente Civico, explicó que más de 600 personas en el municipio requieren la firma electrónica, un requisito indispensable para la formalización de empresas y otros trámites fiscales. Sin embargo, actualmente deben trasladarse a Chetumal, lo que implica un gasto aproximado de 800 pesos por viaje, además de la dificultad para conseguir citas.
“Estamos adelantando información y ya hemos reunido cerca de 300 nombres de personas que necesitan el trámite. Solicitamos que el SAT establezca un módulo en José María Morelos, al menos de manera periódica, para evitar que los contribuyentes enfrenten gastos y retrasos excesivos”, declaró Gómez Tox.
Explicó que los trámites fiscales son personales y requieren la presencia del contribuyente para generar su firma electrónica. Aunque algunos pueden recibir asesoría para sacar citas, la falta de un módulo local ha generado complicaciones, especialmente para los productores agrícolas.
“Muchos campesinos han sido afectados porque su subsidio de energía eléctrica está condicionado a la firma electrónica, pero no todos están actualizados con sus actas constitutivas”, agregó.
Ante esta problemática, la Canaco ha abierto sus puertas a todos los interesados en organizarse para agilizar el proceso. “La Canaco es una institución reconocida por el gobierno y puede ayudar a facilitar este tipo de gestiones”, afirmó Gómez Tox.
Finalmente, hizo un llamado a las autoridades fiscales para que consideren la instalación de un módulo temporal en el municipio, al menos cada tres o cuatro meses, con el fin de atender la creciente demanda de trámites fiscales en la región.
