«El esquismo»
El “Esqueísmo” es la tendencia o mala conducta de buscar justificaciones y excusas para evadir responsabilidades y obligaciones en el deber. La persona con esta mala práctica, siempre trata de justificar o de evadir las cosas con la manía del “Esquismo” «Es que…»
Observe esta parábola de la Biblia
Parábola del gran Banquete.
Cuando uno de los que estaba sentado a la mesa con Jesús oyó esto, le dijo:
― ¡Dichoso el que coma en el banquete del reino de Dios!
Jesús le respondió:
―Un hombre preparó una gran cena e invitó a muchas personas. A la hora de la cena mandó a su sirviente a decirles a los invitados: “Vengan, porque ya todo está listo”. Pero todos los invitados comenzaron a dar excusas. El primero dijo: “Te ruego que me disculpes, pues acabo de comprar un terreno y tengo que ir a verlo”.
Otro dijo: “Te ruego que me disculpes, pues acabo de comprar cinco yuntas de bueyes y tengo que probarlas”.
Y otro dijo: “Acabo de casarme y no puedo ir”.
El sirviente regresó y le contó todo esto a su señor. Entonces el dueño de la casa se enojó y le dijo al sirviente: “Ve pronto por las calles y los callejones del pueblo, y trae acá a los pobres, a los inválidos, a los cojos y a los ciegos”.
Poco después, el siervo volvió a decirle: “Señor, ya hice lo que usted me mandó, pero todavía hay lugar”.
El señor le dijo: “Ve por los caminos y las veredas y obliga a la gente a entrar, para que se llene mi casa. Les aseguro que ninguno de los primeros invitados disfrutará de mi cena”. Lucas 24:15-24.
Me sorprende la cantidad de personas a las cuales les pregunto si creen en Dios, son muy pocas las que me dicen que no. Luego les pregunto si asisten a alguna iglesia, mueven la cabeza y me dicen que no. Cuando les pregunto la razón por la que no asisten a una iglesia, casi todas las personas me dicen “que no tienen tiempo para eso”.
Todos aparentamos amar a Dios, todos queremos un cielo, todos queremos bendiciones, todos quisiéramos que nuestro mundo sea mejor; pero todos tenemos excusas de acercarnos a una comunidad de fe para aprender y adorar. Solo imagínate lo que Dios piensa de esto.
Bendiciones amigos y hermanos caminantes del camino llamado vida. Pbro. Carlos César González Cruz.