Despedida a un grande: el Diego se fue

Por Dylan Vera Silva

Quequi

En este año nos hemos enfrentado a grandes pérdidas, sin importar si son de personas famosas o familiares cercanos, todas duelen por igual, sin embargo, el día de ayer y en medio de una diversidad de dudas, posible negligencia médica, drogadicción y un estilo de vida muy fuerte y agitado, despedimos al que posiblemente es uno de los iconos más relevantes del futbol moderno y por supuesto, por razones que no son muy claras, uno de los más amados fuera de la cancha.

El Diego, Diego Armando Maradona, el argentino que vistió los colores del Argentinos Jrs, Boca Juniors, Barcelona, Napoli, Sevilla y Newells Old Boys y que siempre dejó algo muy claro, “yo no quiero ser ejemplo de nada ni de nadie, solo quiero que me dejen vivir mi vida” se fue. Esta noticia impacta bastante, sin embargo ante todos los problemas de salud previos, casi era seguro que en algún punto su cuerpo ya no iba a resistir.

El Diego se va en una fecha peculiar pues es el 25 de noviembre el día que muere también uno de sus grandes amigos y con el cual mantuvo una relación cordial y de elogios, misma que causó grande polémica en el hemisferio occidental, estamos hablando de Fidel Castro, a quien el pelusa, se refería como un grandísimo héroe y que le enseñó lo que era la fidelidad y el respeto.

Si bien, el mundo no estaba de acuerdo con la inclinación política de Maradona, es de admirar la fortaleza que tenía para sostener y defender sus creencias, sin duda algo sumamente característico de los grandes líderes a nivel mundial. En cuanto a su vida, pues el Diego deja una grande dinastía en la que destacan hijos “legítimos” y unos cuantos que no fueron reconocidos por el astro argentino de forma legal; una odisea la que tuvo el Diego en su vida.

Si bien, en su vida personal cumplió lo que prometió, al no ser ejemplo de nada ni nadie, deportivamente fue otra cosa, comenzando por que su historia en las copas del mundo siempre fue destacada, comenzando en el Mundial de España 1982 en el que el seleccionado argentino quedó mucho a deber quedándose en la segunda fase, pero que sirvió como calentamiento para el Diego.

Fue en México 1986, donde el seleccionado argentino, de la mano del Diego, levantaron la copa mundial en el mítico Estado Azteca, mismo que fue marcado por la famosa “mano de Dios” ante los ingleses y que seguramente fue tan impactante que es uno de los pilares históricos que marcaron la inclusión de la tecnología en el futbol, como lo vivimos hoy en día con el VAR, justo para evitar esta clase de goles, que ironía ¿no?, seguramente el guardameta Peter Shilton vivió con bastante estrés gracias a Maradona durante muchos años.

Otro bello momento, también contra los ingleses fue el llamado “gol del siglo” o “gol maradoniano” en el que deja como auténticos conos en el campo a los jugadores ingleses driblandolos con gran gracia, Glenn Hoddle, Peter Reid y Terry Fenwick entre otros fueron los afortunados y no tanto, de presenciar el gol de Maradona a escasos pasos. Para los amantes del futbol, sin lugar a duda, este es uno de los goles más bellos de todos los tiempos y acompañados con esa narración característica de los argentinos, componen una auténtica joya.

Fueron 724 partidos los que el Diego nos regaló, marcando más de 300 goles como profesional, cifra bastante baja sin duda si es que lo comparamos con las cifras de lo goleadores históricos, siendo en Argentinos Juniors 116 y Napoli 115 los conjuntos en donde más goles convirtió.

Desde aquel 20 de octubre de 1976 cuando debutó Maradona llenó de emoción y amor a todos sus fanáticos, que por sus hazañas fueron creciendo con el tiempo hasta llegar al día en que fue su despedida el 25 de octubre de 1997, con Boca Juniors y ante el odiado rival River Plata, mismo partido en el que iniciaba la era total de Riquelme.

De acuerdo al resultado de su autopsia fue una insuficiencia cardiaca lo que alejó al Diego del plano terrenal, pero sin duda dejó un legado bastante grande como para sacarlo del corazón de miles de fanáticos alrededor del mundo, especialmente de los nacionales argentinos, que llevan todo el día haciendo diferentes homenajes y marchando entre lágrimas. Un último adiós a uno de los personajes del mundo del deporte que si duda más, nos ha hecho sentir lo que es la pasión desenfrenada por el deporte.