Desinterés de Perla para reabrir el CCA
Por Luis Roel Itzá > Quequi
Continúa el desinterés de la presidenta municipal Perla Tun Pech, por cumplir con los requisitos que le exige la Cofepris para que pueda operar el Centro de Control Animal (CCA); han pasado siete meses desde que fue cerrado, pero aún así le siguen pagando su oneroso sueldo a la encargada, además de obstaculizar la labor de la Sociedad Humanitaria de Cozumel (SHC) que les estaba haciendo el favor de hacer su trabajo.
En marzo pasado, personal de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) realizó una verificación a las instalaciones del CCA después de que trabajadores sacrificaran e incineraran indebidamente a 22 perros infectados presuntamente con moquillo, lo que derivó en un escándalo de gran magnitud de la administración de Tun Pech.
Durante la inspección se detectaron anomalías como el inadecuado procedimiento de esterilización al ingresar y salir de las instalaciones, la falta de los medicamentos para aplicar la eutanasia a las mascotas, la falta de un lugar para el resguardo de los cuerpos, así como la no existencia de un procedimiento adecuado para deshacerse de los cuerpos, entre muchas otras anomalías.
Empero, han transcurrido siete meses y la alcaldesa no ha querido sancionar a los responsables del «perricidio», incluso le sigue pagando su oneroso sueldo a la encargada del CCA, Lissette Fernández del Castillo, y tampoco ha querido invertir un peso para cumplir con los requisitos que la autoridad sanitaria les pide para operar el centro y, por lo tanto, no ha hecho nada para resolver el problema de la fauna callejera que se ha convertido en un problema de salud pública.
No conformes con no resolver este problema que es de su completa competencia, la alcaldesa Perla Tun Pech, en actitud revanchista les exige la devolución de 90 mil pesos que les habían otorgado a través del Acuerdo San Gervasio, a pesar de que la SHC había asumido la responsabilidad que le compete al Ayuntamiento, de alojar a los perros abandonados y maltratados, alimentarlos y buscarles un hogar, además de realizar las esterilizaciones sin costo alguno.