Dejó ir la corona a propósito
Los Ángeles
Agencias Quequi
Mucho antes de conquistar al mundo dando vida a la heroína Wonder Woman, Gal Gadot participó y, para su propia sorpresa, ganó el concurso de Miss Israel después de que su madre y amigas la apuntaran sin decirle nada. De ahí, la entonces joven de 18 años pasó a competir por el título de Miss Universo que finalmente no consiguió porque se dedicó en cuerpo y alma a sabotear sus posibilidades de éxito.
«Me dije a mí misma: ‘Venga, voy a hacerlo. Nos van a llevar a Europa y algún día podré decirles a mis nietos que la abuela participó en Miss Israel’. Lo que no me imaginaba es que ganaría. Tenía claro que no quería ganar Miss Universo, no era lo mío. Me parecía demasiada responsabilidad para una joven de 18 años», confiesa la intérprete en una entrevista a Rolling Stone, en la que explica que, entre las muchas tácticas a las que recurrió para impresionar negativamente al jurado, se encontraba el fingir que no hablaba inglés y el vestirse de forma poco adecuada. «Perdí a lo grande, perdí gloriosamente», asegura divertida.
Este pasado como parte de uno de los concursos de belleza más mediáticos del mundo, que en aquel momento pertenecía además al presidente de los Estados Unidos Donald Trump, ha desconcertado a muchos en vista del mensaje claramente feminista que la actriz ha predicado durante la promoción de su exitosa película. Sin embargo, ella no comprende por qué esa anécdota de su pasado contradice el que sea feminista, algo que considera que todo aquel que crea en los derechos de la mujer debería compartir.
«La gente siempre me pregunta si soy feminista. A ver, me parece una pregunta sorprendente, porque claro que lo soy. En mi opinión, toda mujer y todo hombre, todo el mundo, debería ser feminista, porque quien no es feminista, es sexista», afirma tajante.