Deberá pagar miles de euros

Los Ángeles

Agencias Quequi

 

El castillo francés Château Miraval ubicado en la Provenza, al sur del país galo, fue testigo del mejor momento de la relación entre Brad Pitt y Angelina Jolie, y fue el lugar elegido para el enlace matrimonial que próximamente acabará en divorcio.

Una vez rota la pareja, el castillo se puso a la venta a un precio de 60 millones de euros después de haber hecho en su interior cientos de reformas que mejoraron el recinto del siglo XVII. Después se decidió conservarlo como una inversión.

Ahora, una diseñadora de interiores ha desvelado que se enfrentó a un proceso judicial con Brangelina por no pagarle uno de esos trabajos de remodelación. Según una entrevista hecha a la diseñadora, Odile Soudant, en el diario francés Libération, un juez de París ordenó a la famosa pareja a pagar 565.000 euros por dañar la reputación de la empresa de diseño.

Soudant cuenta que trabajó en iluminar cuatro edificios de la propiedad. Según ella, Pitt le dio «carta blanca» para el proyecto. No hubo contrato de por medio, pero la diseñadora defiende que facturó cada mes de trabajo en el castillo que el actor pago hasta cierto punto en el que dejó de hacerlo.

La justicia dio la razón a Soudant, pero ahora sigue batallando con la pareja para que sea legalmente reconocida como la creadora de la instalación lumínica en Miraval, un derecho que, según ella, Pitt cedió a otro trabajador de la propiedad tras la disputa legal.

Este lío judicial es un problema más que acumulan Brad Pitt y Angelina Jolie en su largo proceso de separación, que parece continuar a pesar de los rumores de parón en la demanda de divorcio.

No hay comentarios