De lo importante a los más importante

Pbro. Carlos César González Cruz. El Escultor.

Escoger entre lo bueno y lo malo ya no deja ganancia; es mejor escoger entre lo bueno y lo mejor.
¿Cómo puede hacer eso un ignorante que no sabe la diferencia entre su mano izquierda de la derecha?

Hasta parece absurdo que hayan personas que no sepan la diferencia de lo bueno y lo mejor, que pudiendo escoger entre lo bueno y lo mejor, escojan lo malo para después lamentar «su suerte» o «la cruz que les tocó cargar».
El conocimiento nos permite elegir y tomar decisiones responsables.

Una persona sabía tiene conocimiento, pero además tiene la virtud de saber cómo hacer bien las cosas.
Conocer nos hace saber, pero la sabiduría mueve la voluntad para hacer las cosas como deben hacerse. Siempre hay un conflicto entre hacer las cosas como queremos hacerlas y otra en hacerlas «como debemos».

Puede cuestionarse que una persona con conocimiento haga tonterías, porque quienes hacen tonterías son los ignorantes y se debe a ello, «son ignorantes», pero no se espera eso de quienes tienen el conocimiento del bien y el mal. De los entendidos se espera que escojan entre lo bueno y lo mejor.
De lo que sabes a cómo usas lo que sabes.

Pero no es raro que quienes saben mucho, mucho de lo que saben no lo usan y simulan ser ignorantes de su saber, ya que la ignorancia les deja algun beneficio.

La Biblia culpa más al que sabe y no hace lo que debe hacer.
Observe:
~Recuerden que es pecado saber lo que se debe hacer y luego no hacerlo. Santiago 4:17.
~Pues habiendo conocido a Dios, no le glorificaron como a Dios, ni le dieron gracias, sino que se envanecieron en sus razonamientos, y su necio corazón fue entenebrecido. Rom. 1:21.

Ya no hay excusa, cuando se tiene conocimiento.
¡Bendiciones amigos y hermanos caminantes del camino llamado vida!
Pbro. Carlos César González Cruz. El Escultor.