Cuna de lobos Prisciliano NemegyeiRodrígue
El pensamiento: el escudo de la existencia
*El hombre de todos los tiempos, de todos los pueblos, de todas las culturas.
*La evolución histórica, nunca ha sido garantía de “progreso”.
*Cuando la mente arropa a la personalidad, esta la define.
Las tres etapas fundamentales del hombre se definen en: salvajismo, barbarie y civilización.En ellas, el ser, pasó, a través de los milenios, de nómada a sedentario. En el transcurso del camino histórico descubrió el fuego, la pesca, la ganadería y la rueda, originalmente se alimentó de raíces y luego de descubrir la cacería, ésta lo llevó a la alimentación animal.
La primera organización de la familia, en la barbarie, se diseminó en el clan, la tribu. La horda y la familia nuclear (como hoy la conocemos). En ella funcionó la autoridad del matriarcado. Pues los hombres abandonaban el clan por tiempos extensivos, en busca de alimentación, y las mujeres se encargaban de proveer el cuidado a los hijos y organización en el gueto.
Estas circunstancias llegaron hasta el surgimiento de la propiedad privada, para que la figura del hombre ejerciera autoridad plena en el patriarcado hasta nuestros tiempos, sobretodo en sociedades avanzadas o modernas, ya que en algunos lugares, como el continente africano y algunas tribus de los países latinoamericanos, aún siguen regidos por el matriarcado.
Entonces, el hombre del salvajismo, comienza a separarse de la animalidad irracional para entrar en el mundo del pensamiento estructurado por ordenamientos, códigos y leyes.
Aquellos individuos que colectivamente vivían en la comunidad solidaria, por ejemplo, de matar un mamut y todos adquirir partes iguales, sin disputar ventajas, le llamaron “comunismo primitivo”. Fue después del salvajismo, donde el hombre descubre la propiedad privada y por consecuencia natural, las guerras para apropiarse de otros pueblos, y entonces, entra en la segunda fase de su existencia: la barbarie.
De aquí, desde la Grecia legendaria, el Egipto imponente, surgía la Roma imperial. Pero a pesar de los grandes adelantos de estas culturas, el hito histórico que marca el comienzo de la evolución moderna, en la civilización, es la Revolución Industrial en Inglaterra, con el descubrimiento de la máquina de vapor. La Revolución Industrial, no fue pequeña cosa, fue el cambio del artesanado a la máquina. Fue el surgimiento de la producción en series. Fue la creación de los sindicatos y la implementación del salario. Fueron las articulaciones de nuevas leyes de protección ciudadanas.
En esta etapa antelar a la Revolución Industrial, también trajo consigo las tres etapas fundamentales de la sociedad: esclavismo, feudalismo y capitalismo, y con ello, formas nuevas antigonas o contrarias como el socialismo,el sinarquismo y el comunismo.
De todo este acontecer, último en boga con la industrialización surgieron las primeras patologías psicosomáticas, como el estrés y la jaqueca, la contaminación ambiental fue un efecto toral de este hecho.
En menos de 50 años de Revolución Industrial, el hombre cambió conductas y modificó pensamientos, en tan sublimes circunstancias que se vieron reflejadas en la Revolución Francesa, hasta la primera y segunda guerra mundial.
El hombre moderno con suerte despejada y abierta al horizonte, nació víctima del estigma del poder, el hombre doblega al hombre o por mejor decir, la bestialidad mayor del hombre, es el propio hombre. Y el capitalismo es su mejor escuela.
Aquí en América lo hemos visto con claridad histórica. Fuimos marginalmente conquistados por el colonialismo español. Nos liberamos solo para cambiar de amos, ahora al imperialismo gringo.
Hemos peleados en revoluciones internas, donde nos hemos eliminados traicioneramente, como vulgares vendettas de mafias sicilianas.
Obregón mató a Carranza y a francisco Villa, y Carranza mandó a matar a Emiliano Zapata; Plutarco Elías Calles, fue el asesino intelectual de obregón etc. Y todo ha girado en tono al poder.
Somos un pueblo destacado en la simulación y hoy, ahora mismo, en estos tiempos electorales, las promesas de campañas, como pujas de subastas abundan, la realidad escondida tras el cortinaje del escenario esperando su presentación sonríe tímida a su coqueteo. Y el pensamiento motiva un sueño, que se divorcia de la realidad. Los discursos no le piden ayuda mínima a las cartitas de Santa Claus, y el pueblo danza a conveniencia de cotizar su credencial electoral, preservar el empleo municipal o corresponder al apoyo cedido con antelación.
Muchos en Tenosique hablamos de democracia, como una necesidad imperiosa, pero ignoramos implementarla como una forma de vida. La falta de disciplina en el pensamiento nos congela en el discurso florido, pero nos divorcia de la realidad. Creemos que la juventud es garantía de fe política y de convencimiento social, y así debiera ser en una sociedad desarrollada, equilibrada y justa, que gozara de solvencia moral, pero los tiempos de admiración y fe juvenil para el futuro, dan con el traste de Peña Nieto y los bisoños, exgobernadores que se robaron un buen pedazo de país.
Hoy estamos hundidos. Estamos sumergidos al dolor. Los pensamientos más claros, que han develado el cortinaje de la oscuridad, tienen enfrente como mínimo, que ya por ello es algo grande, decidir su voto por López Obrador, cuando alrededor sólo vemos la miseria de una política que nos trague como nación, o el cambio, nos reivindique como sociedad.
Hagamos trabajar a la mente para la decisión, objetiva. Sin prisas, sin engaños y a partir de ahí, construyamos un futuro con nosotros mismos, bajo el cumplimiento gubernamental de la última esperanza, porque ahora no habrá mañana.