Crece la violencia obstétrica

Por Mayra Cervera > Quequi

De seis mil 52 quejas por agresión hacia las mujeres atendidas en todo el estado, alrededor de 40 casos son por violencia obstétrica, siendo la Zona Norte en donde se registran mayores casos de víctimas.

Debemos recalcar que se entiende por violencia obstétrica cualquier acción que patologice los procesos reproductivos naturales y biológicos. Estos se expresan mediante un trato deshumanizado por parte de los profesionales de la salud, relacionados con todo el procedimiento que conlleva un embarazo. Abarca desde el periodo de gestación hasta el posparto, por lo que afecta de manera directa o indirecta, el cuerpo y los procesos reproductivo de las mujeres.

De acuerdo a datos proporcionados por el Instituto Quintanarroense de la Mujer (IQM), durante 2016 fueron reportados 40 casos en la entidad, uno de ellos en Othón P. Blanco en febrero; la mayor incidencia está en Cozumel con 19, seguido de Lázaro Cárdenas con 10 y Benito Juárez con cinco.

El regidor capitalino, Jesús Muñoz Tun, de la Comisión para la Igualdad de Género, señaló que la violencia obstétrica es el maltrato que sufren las mujeres embarazadas a manos de cualquier prestador de servicio médico de los hospitales o centros de salud, donde acuden a revisión, maltrato que, enfatizó, debe ser denunciado.

Dijo que es importante trabajar en el tema, para que las mujeres embarazadas conozcan qué es la violencia obstétrica y poder garantizar sus derechos durante su periodo de gestación, que es cuando más se presenta esta condición.

Explicó que la violencia obstétrica es el maltrato que presentan las mujeres embarazadas al ser juzgada, atemorizada, vejada, lastimada física y emocionalmente, condiciones que sufren a manos de cualquier prestador del servicio médico, independientemente del sistema de salud al cual acuda.

También incluye no ser respetada en sus decisiones con respecto a su estado, principalmente al momento de dar a luz.

“La XIV Legislatura presentó y aprobó la reforma a la Ley de Salud para integrar el concepto de violencia obstétrica, con lo cual se buscaba garantizar los derechos de la mujer; sin embargo, este concepto aún es nuevo, ya que son pocos las denuncias que llegan.

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