Cede edil ante transportistas

PLAYA DEL CARMEN

Luego de sostener un diálogo con la presidenta municipal de Playa del Carmen, Laura Beristain, trasportistas turísticos lograron que la edil les otorgara hacer ascenso y descenso en varios puntos de la ciudad, tal y como lo están haciendo las empresas “patito” que llegan a los estados de Chiapas, Tabasco y Veracruz.

En este sentido los representantes de cuando menos 10 empresas legalmente constituidas, lograron el objetivo de operar en la venta de boletos dentro de la ciudad.

En cuanto al problema que está generando las empresas «patito», sus permisos serán revisados minuciosamente ante las oficinas de transporte y vialidad.

Además argumentaron los inconformes que ellos tienen nueve años de estar operando en la terminal de los taxistas de Playa del Carmen, donde deben estar todos los autobuses de segunda clase que llegan a loa estados antes mencionados.

Cabe mencionar que los representantes de las empresas turísticas le entregaron a la alcaldesa un documento firmado en donde exigen suspendan definitivamente el derecho de ascenso y descenso que tienen otorgado a unas cuantas personas que venden boletos en la vía pública, haciendo ascenso y descenso de pasaje.

“Algunas de estas son operadas por coyotes que no tienen transportes si no que rentan las unidades en plena temporada alta y sobre todo no brindan seguridad a los pasajeros en caso de algún accidente, abaratando el pasaje al mejor postor”, indicaron los inconformes.

Las paradas de autobuses piratas, las hacen de manera irregular en la avenida Colosio entre 40 y 45 (turismo Pompo).

Otros paraderos que tienen ventas de boletos se encuentran en la avenida 25 contra esquina del parque de la colonia Colosio 125 con 8 (Megabus), Carretera Federal con 106 frente a la Fonda Argentina y a espaldas del marcado Luis Donaldo Colosio.

Otra de las faltas de los transportes “piratas” es cometida cuando para avanzar bloquean los carriles de continua con precaución, obstruyendo el paso a los automovilistas que necesitan hacer uso de la vía.

Por Ramón Uresti Hernández