Cansados de amenazas y despojo de predios
Por Redacción
Ejidatarios de Juan Sarabia pidieron la intervención del presidente Andrés Manuel López Obrador y de las autoridades locales, para detener los despojos de predios y amenazas al interior del núcleo agrario.
Recientemente, el integrante de ese ejido, José Antonio Álvarez Antoja, resultó herido de bala, tras ser atacado con arma de fuego cuando viajaba con su hijo en un vehículo Sentra, color gris, sobre el tramo Xul-Ha – Bacalar.
Al respecto, los ejidatarios de Juan Sarabia consideraron que ese atentado es fue acto intimidatorio de quienes aún controlan el Comisariado Ejidal de Juan Sarabia. Como es el caso de los ex presidentes Ernesto Haro Gutiérrez y Marcos Jiménez Potenciano, quienes presuntamente manipulan al actual dirigente Lauro Cantú Galindo para intimidarlos y amenazarlos para despojarlos de su patrimonio, más aún en contra de quienes se atreven a denunciarlos.
Además, denunciaron que las autoridades agrarias están coludidas, permitiendo toda clase de abusos desde hace cuatro administraciones.
Sus versiones
De acuerdo con los denunciantes, Jiménez Potenciando y Ernesto Haro Gutiérrez encabezaron administraciones que han agraviado a los 597 ejidatarios que pertenecen a Juan Sarabia, perpetuando despojos en contra de personas de la tercera edad, fraudes, ecocidios, privatizaciones de bienes ejidales, daños a vestigios arqueológicos, actos de violencia y una serie de abusos al amparo del influyentismo y la corrupción de autoridades de gobiernos anteriores.
Ante esta situación, insistieron en una intervención más enérgica y a fondo de parte del presidente López Obrador y de las autoridades estatales.
Lauro Cantú para ganar votos “apoyó” a los ejidatarios que no habían recibido su cheque por haber sido señalados en una lista en la que los habían condicionado de retirar su demanda de un 10 por ciento que les fue retenido de manera ilegal.
Y que tanto Ernesto Haro como Marcos Jiménez le habían cubierto las espaldas, haciéndose cómplices con todo y cayendo en desacato, pues hay una orden del Tribunal Agrario de pagar ese dinero, uno de los muchos conflictos heredados que el actual presidente del Comisariado Ejidal no ha resuelto.
