Autoridades son cómplices
PLAYA DEL CARMEN
El Ayuntamiento de Solidaridad solapa de forma descarada una construcción irregular de dos niveles en un edificio que es propiedad de Álvaro Moya Corral, influyente empresario que se ha beneficiado por el IPAE de Roberto Borge con millonarios predios subvaluados. Pese a las denuncias ciudadanas, la obra en cuestión ha avanzado con una licencia de construcción que en primera instancia el municipio reconoció como apócrifa, pero que luego decidieron clasificar como “información reservada”, posiblemente porque en ella figura el nombre de Alberto Farfán Bravo, secretario general de la Comuna, como responsable de obra.
Juan Valdivia, tesorero de la asociación “Somos Tus Ojos”, explicó que desde hace meses los vecinos de Zazil Há denunciaron la ilegal construcción de dos niveles adicionales en el edificio “Latitud 20” que es propiedad de Álvaro Moya Corral, con valor estimado de 350 mil dólares, debido a que esta bloqueó la vista al mar. Aunque el propietario mostró una supuesta licencia de obra, al averiguar sobre esta en el municipio, se les contestó que era un documento apócrifo, por lo que fue cancelado.
No obstante, pasaron los meses y el Ayuntamiento jamás fue a clausurar la construcción o la operación de este edificio condominal, pese a que la licencia de uso de suelo también figuraba como cancelada.
Por ello, a través de “Somos tus Ojos”, se solicitó a Transparencia el expediente completo sobre esta construcción, el que fue contestado con el ilógico argumento de que había sido clasificado como reservado por un plazo de 18 meses.
“No existe ninguna razón de ley para reservar esa información, mucho menos por 18 meses, que les da tiempo para que todos los involucrados dejen sus cargos”, lamentó Juan Valdivia. “Tal parece que quieren proteger a Alberto Farfán Bravo, hoy secretario general del Ayuntamiento, que figura como responsable de obra de la construcción original”.
EL QUE CALLA OTORGA
En representación de los vecinos afectados de Zazil Ha, Juan Valdivia acudió a la última audiencia pública del municipio, donde micrófono en mano expuso su caso. Sin embargo, la presidenta municipal, en lugar de dar cualquier tipo de respuesta, sencillamente enmudeció, y esperó a la intervención del siguiente ciudadano, rompiendo todos los protocolos del evento.
El activista dice que esto no lo desanima, por lo que ya interpuso una queja en la Comisión de Derechos Humanos por la negativa a dar información, la que el municipio está obligado a responder.
Cabe destacar que Álvaro Moya Corral es un conocido empresario borgista, que obtuvo un terreno de más de un millón de metros cuadrados en Akumal por parte de la hoy prófuga Claudia Romanillos Villanueva, al absurdo precio de 65 pesos el metro cuadrado. Esta transacción fue duramente cuestionada por el Congreso del Estado, que exigió la restitución del patrimonio robado.
Por Mario Morales Cruces >Quequi