Auditarán a concesionaria; convocan a revisar normas ambientales en recoja de basura; urge plan de manejo
Por Luis Roel Itzá
Quequi
Se lanzó la convocatoria para realizar una auditoría ambiental a la empresa concesionaria de la recoja de la basura en la isla con la finalidad de determinar si está cumpliendo con las normas ambientales establecidas en las reformas municipales, estatales y federales. Hasta donde se tiene conocimiento la Semarnat solo autorizó dos celdas más para el relleno sanitario, actualmente están en el proceso de evaluación de las empresas, aseguró Bruno Diaz Solís, síndico municipal, quien dijo que urge tener un plan de manejo de los residuos sólidos ya que de acuerdo a estudios realizados solo el 30% de la basura generada en la isla debe ir al para relleno sanitario, el restante puede ser reutilizado.
El funcionario, dio a conocer que la empresa cobra poco más de tres millones de pesos mensuales por la recolecta diaria de la basura que se lleva al relleno sanitario, y recientemente solicitó a la autoridad ambiental federal la construcción de seis celdas para el relleno sanitario que están considerados en el contrato de concesión por 20 años que concluye en el 2030, sin embargo, solo se les autorizaron dos y se deberá realizar una auditoría ambiental próximamente para saber si cumplen con las Normas Oficiales Mexicanas y las reformas a las leyes ambientales para el adecuado manejo de los residuos, ya que Cozumel por su condición de isla y la poca profundidad a la que se encuentra el manto freático, debe extremarse su manejo para evitar contaminación.
Bruno Diaz Solis, dijo que la información que se tiene es que el 50% de los residuos que llegan al relleno sanitario es orgánico, el 20% es reciclable y solo el 30% es residuo, que ya no tiene ninguna utilidad, por lo que solamente este porcentaje debería estar en el relleno sanitario, por lo que destacó que urgen políticas y programas de separación y reciclaje por parte de la ciudadanía para que se pueda dar mayor vida útil al relleno sanitario, ya que de acuerdo a las nuevas leyes ambientales en las islas, no deberían autorizarse los rellenos sanitarios y toda la basura debe ser llevada al mazo continental lo que aumentaría el costo de la recolecta.