ALEXIS SHAFFER. Si Es Posible Estar En Paz
¿TU PAREJA ES CULPABLE DE TU INFELICIDAD?
Si la culpa y la crítica son un problema crónico en tu relación, es el momento de hacer algo al respecto. Este patrón destructivo puede aniquilar una relación y todos los buenos sentimientos que quedan del uno para el otro.
Dejen de culparse, ahora es el momento de acercarse de nuevo. Puede ser que no son conscientes de lo mucho que se quejan, es como un hábito difícil de superar.
Estar en un estado perpetuo de la queja no es agradable y el hecho es que cuando más se quejan, van a encontrar más motivos para quejarse. A esto le llamo «El remolino de la queja.» La culpa, la crítica y las quejas, son vampiros de energía en las relaciones. Si desean liberar una cantidad increíble de energía, ponte a ti mismo y a tu pareja en una dieta «sin culpar». No más culpas.
Quejarse puede ser un hábito incansable y una adicción difícil de dejar
Así es cómo se inicia la espiral de la queja: estás en una relación, y se te antoja más intimidad o más espacio respecto a tu pareja.
No importa lo que haga tu pareja, nunca será suficiente. Porque nunca lo vas a sentir como suficiente, y experimentarás la desesperación interior, y también sufrirás un agotamiento de la energía. Y esto, por supuesto, sólo puede atraer más quejas, porque quejándote creas drama y creando drama es la manera que puedes sentir temporalmente más energía.
Hay que tomar que es el núcleo de tu queja, la razón por la que fuiste atraído por esta persona. Lo que está claro es que hay necesidad de aprender algo sobre ti mismo a través de esta relación.
Hasta que sepas lo que es, pases por el proceso de aprendizaje y su incorporación dentro de tu ser, vas a perderte en esta espiral y nunca pensarás que tu pareja es suficiente.
A menudo, cuando te quejas de algo que no estás recibiendo de tu pareja, por ejemplo mayor intimidad, respeto, consideración y ternura, debes considerar esto como una señal, una generosa alarma, de que tú no estás dándote esas mismas atenciones a ti mismo. Proyectas y ves en el otro tus propios pensamientos acerca de ti.
Es sólo cuando aprendes a amarte a ti mismo que puedes sentirte cómodo con lo que los demás te dan o no te dan, porque te sentirás auténtico y completo tal cual cómo eres. Aprende cómo amarte a ti mismo. Supera la necesidad de siempre querer más de tu pareja. Si estás contento con lo que eres vas a atraer más amor de manera natural y sin ningún esfuerzo.
Cuando te encuentras en un remolino de quejas, te aconsejo estos 2 pasos de acción que son claves para salir de él:
Deja de tratar de arreglar tu pareja. Dejar de centrarse en lo que ella o él tiene que hacer o dejar de hacer. Date cuenta de que el problema no es de ellos, es realmente algo que está dentro de ti. Hay algo que tienes que reconocer en ti mismo, y hasta que hagas eso, nada de lo que trates de hacer para arreglar la otra persona va a cambiar el grado de satisfacción que sientes en la relación. El quejarse es sólo un vampiro de energía y una distracción negativa.
Expresa tu propia creatividad. Algo está languideciendo en tu interior. El hecho de que te quejes significa que estás tratando de encontrar una manera de expresarte. La forma de sacarlo es expresar tu propia creatividad cada día. Cuando dejas de quejarte y obsesionarte en cambiar a tu pareja, y empiezas a explorar lo que es lo que TÚ necesitas para sentirte más completo y feliz, tu relación se elevará a un nuevo nivel de intimidad.
¡Cuando haces una prioridad el amarte a ti mismo, la clave para sentirte contento y lleno de energía, está dentro de ti!
Te sorprenderá descubrir que tu queja, se refiere a todo lo que has estado descuidando en el interior de ti mismo. Y lo que puedes empezar a hacer, con la garantía de que obtendrás beneficios inmediatos y muy potentes, disfrutarás de una mayor tranquilidad y serás más feliz con tu pareja, es ser más auténtico, cambiar tu enfoque de culpar lo que sucede en lo exterior y enfocarte en amarte a ti mismo.
Se te permite:
Aceptar todos tus sentimientos y compartirlos abiertamente con tu pareja, lo que significa menos fricción, menos quejas y más intimidad.
Establecer y mantener límites claros acerca de lo que debes y no debes hacer, lo que detendrá las quejas en camino, porque ya no te sentirás «víctima» de tu pareja.
Gozar de ser amado por otra persona sin dudar, o poniendo siempre a prueba su amor. Esto se debe a que te sentirás digno de amor, independientemente de lo que hace o deja de hacer tu pareja.
Confía en ti mismo para manejar todo lo que se presente. De esta manera, no estás operando constantemente con el temor de ser herido y creando subconscientemente las condiciones en las que el amor te puede defraudar.
Aprender a amarte a ti mismo es, sin duda, el detalle más poderoso que puedes hacer por ti mismo, que tendrá un profundo impacto en todas tus relaciones, y lo más importante, en tu relación contigo mismo.
En todo momento recuerda que amarte a ti mismo, también significa conectar con tu Ser Superior, el Divino, que es una vibración más alta en ti, que te ayudará a superar todas las barreras.
De vez en cuando, es una buena idea revisar tus motivos y actitudes con los que te rodean. En todas tus relaciones nunca permitas que los resentimientos se acumulen, porque tarde o temprano, lo que está dentro de ti va a fermentar y explotará causando trastornos, sacando a flote lo desagradable, lo repugnante y la desunión.
Tienes que ser lo suficientemente consciente para frenar tus percepciones de lo externo y mirar en tu interior, antes de culpar a cualquier otra persona. Observa lo que personalmente puedes hacer para corregir un error y cuando seas capaz de ver una solución, asumir la responsabilidad y hacerlo al instante sin esperar que la otra persona dé el primer paso.
Haz la conciencia una prioridad, ya que es esencial para la creación de relaciones exitosas. Y toma conciencia de que las barreras levantadas por los profundos resentimientos internos y la discordia, están impidiendo que fluya libremente el amor en tus relaciones.