Afilian Ramos a taxistas con fines políticos
CANCÚN
Por Adriana Fernández > Quequi
El “clan de los Ramos” que hoy encabezan Emiliano y Alejandro Ramos Hernández, llevan a cabo una campaña de afiliación masiva de taxistas al Partido de la Revolución Democrática (PRD), utilizando como “bandera” la lucha contra Uber, todo en apoyo a las aspiraciones del primero con miras a una candidatura al Senado o incluso la presidencia municipal de Benito Juárez, en 2018.
La campaña de afiliación inició desde hace algunas semanas dentro de las instalaciones del Sindicato de Taxistas, en donde le piden a los socios u operadores una copia de credencial de elector, comprobante de domicilio, además de pedirles que acerquen a sus familiares a sumarse al Sol Azteca.
Esta situación habría sido impensable hace unos años en la “ola verde”, que incluso en sus estatutos se declara como priista.
Cabe recordar cómo hace diez años, José María Ávila Gamboa fue expulsado de este gremio, por manifestar su apoyo a un candidato que no era del tricolor. Su expulsión vino “fast track” y el agraviado debió demandar en la Junta de Conciliación y Arbitraje para que le reestablecieran sus derechos.
Hoy, sin embargo, desde la misma sede se llama a los chafiretes a pasarse al partido amarillo. Para lograr este “amarre” con el Sindicato de Taxistas “Andrés Quintana Roo”, ambos se vendieron a sí mismos como paladines en la lucha contra Uber.
Alejandro Ramos, como director de Transporte de la Secretaría de Infraestructura y Transporte (Sintra), coordina los operativos en contra de usuarios de esta plataforma, varios de los cuales se han visto manchados por violencia de taxistas, quienes están en coordinación constante para acudir a los sitios donde se detecten operadores de Uber.
Emiliano Ramos, como diputado local, ha prometido frenar cualquier intento por legalizar esta plataforma, e incluso introdujo una iniciativa de ley que pagaba con cárcel a quien era detenido brindando transporte sin licencia de taxi, misma que no prosperó.
Con ello, ya obtuvieron el visto bueno de Eric Castillo, secretario general del sindicato “Andrés Quintana Roo” para realizar su campaña de afiliación, supuestamente hacia el PRD, aunque en realidad para el proyecto privado del “clan de los Ramos”, que también incluye a su padre, Salvador Ramos, ahora en Morena, Rafael Quintanar, exdirector del Instituto Estatal para la Educación de Jóvenes y Adultos (IEEA), entre otros.
A cambio de que los taxistas se afilien al Sol Azteca, Eric Castillo entrega boletos para participar en una rifa especial que se llevará a cabo el 29 de junio, donde se premiará con lavadoras, hornos de microondas, dos automóviles tipo Tsuru y una concesión de placas.
Cabe señalar, que los hermanos Ramos han pactado un compromiso con Eric Castillo, dirigente del Sindicato de Taxistas, para que en las próximas elecciones del 2018, una de las hijas del líder transportista se postule como candidata a diputada local, según nos confió una fuente de forma anónima.
El declarante, quien prefiere guardar su identidad por temor a represalias, comentó que existe un grave conflicto de intereses dentro del transporte, debido a que no se puede ser “juez y parte”, como lo hace Alejandro Ramos, quien se está “brincando las trancas”.
“En este tema existe un cúmulo de intereses familiares”, explicó. El clan de los Ramos ha perdido poder dentro de su partido, porque ellos también forman parte del despilfarro que cometió Roberto Borge en el estado. Ahora, al verse atrapados sin que ningún partido que los respalde, ya quieren formar su propio partido, engañando a los pobres trabajadores del transporte.”
Efectivamente, Emiliano Ramos, retuvo de forma ilegítima la dirigencia del PRD estatal por casi cinco meses, en contubernio con el Tribunal Electoral local. Aunque los estatutos lo prohíben, rindió protesta como diputado local sin abandonar su cargo partidista. Eventualmente, fue destituido por el tribunal federal, quedándose no sólo sin la dirigencia, sino removido también de la coordinación parlamentaria de su partido.
En los últimos meses, los Ramos han visto cómo sus opiniones ya no son tomadas en cuenta por el Sol Azteca, por lo que ya buscan lanzarse en un proyecto político personal, en el que ofrecerá su botín de taxistas afiliados, al partido que le ofrezca la candidatura codiciada.
“Lo que ocurre es que saben que trabajaban para el borgismo y ahora han sido evidenciados”, nos comentó otra fuente, consejero del este partido. “Ahí están las listas de cómo cobraban en Solidaridad, era dinero de Góngora, que usaban para mantener el control del partido, pero eso ya se acabó”.