Eucalyptus trees lay on the ground in pieces during logging at the Jiayao Forest Farm in south China's Gaoyao, Guangdong province, Monday 04 July 2005. While the average Chinese citizen uses 17 times less wood than a person in the US, surging demand in China is straining the forests of countries exporting lumber such as Russia, Malaysia and Indonesia. China's forests and plantations will provide less than half of the countries expected industrial wood demand by 2010, according to the World Wildlife Fund. (KEYSTONE/EPA/MICHAEL REYNOLDS)

Acaban con los ‘pulmones’

Por Sergio López Lara > Quequi

El dirigente de la Unión Nacional de Organizaciones Campesinas Autónomas (Unorca), Marcelo Carreón Mundo, aseguró que a pesar de las promesas de instancias federales, estatales y municipales para proteger los bosques y selvas de Quintana Roo, sigue la tala clandestina de árboles de pequeñas magnitudes como caoba, cedro, chicozapote; entre otros, que son utilizados para la construcción de muebles y duelas de triplay en Campeche y Yucatán, donde existen los principales depredadores.

Explicó que en infinidad de ocasiones se ha denunciado ante instancias federales, estatales y municipales el robo y saqueo de maderas duras y preciosas, que se encuentran en la selva y bosque del Sur de Quintana Roo; asegura que lamentablemente nadie ha hecho nada al respecto, debido a que los talamontes siguen devastando los pocos “pulmones” naturales que le quedan a la tierra en el estado.

Agregó que lamentablemente esta situación se ha ido adentrando a la Zona Maya del Sur del Estado, donde los campesinos rentan u ofrecen sus tierras para la devastación de árboles milenarios, como ceiba, caoba, cedro, chicozapote y chacá, entre otros, situación que está afectando gravemente al ecosistema, debido a que la mayoría de sus habitantes dependen de la venta de madera y carbón perfectamente regularizado.

Carreón Mundo indicó que la lucha social se ha realizado por más de 20 años para proteger a la selva de Quintana Roo, que hoy se ve amenazada por grandes desarrollos turísticos que nada benefician al Sur y Centro del estado, los cuales son de los más olvidados por los gobiernos federal, estatal y municipal, además de continuar la tala clandestina de árboles en peligro de extinción como caoba, cedro y chicozapote, que son utilizados para construir duelas de lambrín, suelas de zapatos y otros artefactos de decoración que se cotizan en miles de dólares a nivel internacional.

No hay comentarios