Ni ‘Santa María’ les ayuda
CANCÚN.-
El fraccionamiento Rincón Santa María, es un lugar de viviendas semiconstruídas en la región 212, donde existen algunos inquilinos, pero ante la quiebra que el mismo líder cetemista Isidro Santamaría reconoció desde el 2012, vecinos de ese lugar se han enfrentado a problemáticas de falta de luz, servicios públicos y es una zona de inseguridad de Cancún.
Ante la disidencia de agremiados de la Confederación de Trabajadores de México (CTM), delegación Cancún, Quintana Roo, que expusieron a través de Twitter las 74 propiedades del líder “charro” Isidro Santamaría, quien en su éxito pretendido como empresario inmobiliario reconoció, que el fraccionamiento Rincón Santa María fue un fracaso y se declaró en quiebra, hoy es el quinto regidor de la Comisión de Desarrollo Urbano.
Las familias que viven en el lugar son agremiados de la CTM, que a través de su crédito de Infonavit compraron estas pequeñas casas, sin embargo, al declararse en quiebra, dejó a los habitantes de esta zona con una problemática de inseguridad, falta de servicios públicos porque como muchos otros fraudes inmobiliarios, no pagan la municipalización al ayuntamiento.
MÁS PROBLEMAS
Desde hace 20 años, que Isidro Santamaría Casanova está en el poder de la CTM, también construyó el fraccionamiento Rodríguez Alcaine y sus terrenos, que señala “salieron” de su dinero, los habitantes se preguntan “¿Cuánto gana un líder sindical o cómo obtiene el dinero para que pueda construir fraccionamientos?”.
Los vecinos de Rincón Santa María desde el 2012, tuvieron un grave problema con la Comisión Federal de Electricidad, porque a falta de transformadores, que debió poner el dueño del fraccionamiento, se quedaron sin alumbrado público, además de que es una zona en donde no se ha desarrollado el comercio por esta misma situación.
A pesar de que el fraccionamiento no fue terminado, a través de internet, varias empresas inmobiliarias rematan estas casas en menos de 200 mil pesos, estas empresas las anuncian como fraccionamiento cerrado con seguridad, pero no explican la problemática en que se encuentra. (Por Verónica Fajardo).
