Carlos César González Cruz Presbítero

 

 

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¿Cuánto cuesta la cuesta de enero?

Vaya que ha sido pesada la economía con el gasolinazo al iniciar el nuevo año, y sin duda alguna, esto traerá una escalada en los precios de la canasta básica. Cuando se habla de la cuesta de enero, se piensa en la gente pobre que para su celebración de navidad y fin de año, se deshace de algunas cosas de valor, ya sea vendiéndolas o empeñándolas.

Los analistas políticos y demás peritos en la materia financiera, dicen que el aumento de la gasolina era necesario; tal vez usted como yo, entendemos nada o poco de esto, lo que en realidad vemos y entendemos es que vivir y comer cada vez es mas difícil para muchos mexicanos.

Dicen por ahí que “lo que no mata fortalece” y que “no hay mal que dure cien años ni cuerpo que lo resista”; con esto, es necesario pues fortalecernos cuidando nuestra economía y pensar hacer ciertos recortes a algunas cosas que hacemos sin medidas. Puedo mencionar entre algunas cosas estas:

  1. El buen y correcto uso de los celulares, computadoras, tabletas etc. Muchos de nosotros nos hemos hechos viciosos a estos aparatos, despilfarramos tiempo y energía que pega seriamente en la economía.
  2. Cuidar más los alimentos. Hay personas que hacen demasiada comida la cual no la consumen y la tiran, entre eso la frutas o verduras.
  3. Hay que poner reglas en los bolsillos para no caer en el vicio del comprador compulsivo; debemos de preguntarnos ¿Realmente necesito esto que voy a comprar? ¿Qué pasa si no lo compro? Debemos distinguir entre una necesidad real y aquella que nos imaginamos que es una necesidad. No debemos comprar nada bajo el pretexto de que “está barato”
  4. Eliminemos aquellas “cositas que están por demás”, por ejemplo: No es necesario estrenar porque cumpliste años de casados, de vida o porque es una fecha en la cual siempre comprabas ropa, zapatos etc., Demuestra que te quieres y que quieres a otros con algo que no necesariamente sea material y tengas qué gastar.
  5. Cambia tus hábitos, elimina alimentos entre comidas, refrescos, dulces, chocolates y botanas. Hay que tener templanza, dicen que la templanza es lo que no te empanza. Hay que equilibrar la voluntad sin excederse.
  6. Por último, creo que estos tiempos y los que vienen no están para jugar a “tontas y ciegas” debemos hacer un proyecto familiar claro, objetivo y definido, esto marcará no solamente el rumbo de lo que queremos sino de lo que debemos hacer. Los aviones tienen un plan de vuelo y una ruta, las personas maduras saben a donde van y lo que quieren en esta corta vida.

Amigos y hermanos, no olvidemos que nuestro paso por esta tierra es breve, y solamente estamos de paso y de paseo. Así lo dice la Palabra de Dios: “La vida del hombre es como la hierba; brota como una flor silvestre: tan pronto la azota el viento, deja de existir, y nadie vuelve a saber de ella. Salmo 103:15-16 ¡Feliz Fin de semana amigos y hermanos del camino, del buen camino de Dios!.

 

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